Por Gil de la Pisa Antolín.- Vale la pena comentar lo que está ocurriendo en Francia donde –según leemos en una revista francesa– los católicos ya sufren una guerra sin cuartel en algunas ciudades, por ejemplo Nantes. Según el párroco de Notre Dame: «La situación se ha deteriorado dramáticamente. Hay quienes amenazan física y verbalmente a feligreses y visitantes, incluso escupen a las monjas. La gente roba velas, esparce cera por el suelo, defeca en los confesionarios…», y según carta de dos monjas que han tenido que abandonar el centro de la ciudad tras años de agresiones: «La escalada de violencia a la que asistimos no se mitigará con una mayor presencia de las fuerzas del orden. Pueden mitigar algunos efectos, pero no debemos engañarnos: quienes crean este clima de inseguridad no han cambiado su comportamiento con la llegada de la policía”.

Por otra parte el periodista Iván Rioufol, de Le Figaro escribe: «Conozco muy bien la ciudad donde nací y donde empecé a trabajar como periodista. Cuando me fui de Nantes en 1984, la ciudad era tranquila, incluso en los barrios más obreros. Los inmigrantes eran minoría. Hoy, Nantes se ha vuelto libanesa». La ciudad alberga la 4ª mezquita más grande de Francia, con 2.500 fieles.

¿Responsables de este caos? Los inmigrantes ilegales y la izquierda radical. ¡El binomio con el que la Sinagoga de Satanás va aniquilando la Europa que fue cristiana!

Es el momento de recordar el refrán: “Cuando las barbas de tu vecino…” y proceder en consecuencia “poniendo las nuestras en remojo…”

Desde los años sesenta en que me suscribí a la revista “Minute” he seguido con lupa lo que iba ocurriendo en Francia. Por entonces, en España estábamos muy lejos de la nueva invasión mora, pero les puedo asegurar que nuestra Patria está copiando los pasos de la reciente Historia del país vecino que tiene el final que ustedes mismos pueden imaginarse. Por otra parte si han visitado esas zonas donde ya los franceses blancos o han huido o están a punto de largarse pueden imaginarse lo que no tardaremos muchos en vivir en nuestras ciudades y pueblos empezando por aquellos donde ya empieza a verse en las clases muchos más Mohamets que Jordis, Iñakis y Pepes. Yo podría, a mis años, no darle importancia y despreocuparme del tema diciendo lo del monje (“¡para lo que me queda en el convento!”) si no tuviera hijos y nietos pero tú joven lector tienes que tomar en serio la amenaza que tenemos sobre nuestras cabezas de católicos y españoles… sobre todo habida cuenta de que los “moros” no se olvidan de que fueron expulsados ya hace más de quinientos años pero tienen unas ganas muy especiales de volver al suelo hispano que consideran suyo.

Aunque la “bondaditis” que padece nuestra sociedad no les permite entender que la “vuelta de los moros” no es una vuelta cualquiera… No hace mucho vemos que su deporte favorito es “rebanar cuellos «disfrutan tanto que pensando que los demás son como ellos lo trasmiten por televisión ¿O se les ha olvidado el arte que tienen manejando el cuchillo? Espero no escandalizar a mis lectores con esta cruda redacción de una realidad infalible. Y me imagino que con las ganas que nos tienen el espectáculo que montarían en España no será tan pacifico como el montado en la Europa ya invadida y cada vez más próxima a su conversión en “Eurabia”.

Insisto en que la “barbería” de la nueva España mora será muy especial por lo que si aún conservan un poco de sangre hispana debería reacción de la única manera posible aplicando el conocido consejo invitándonos a poner las barbas a remojar viendo lo que ocurre con las de nuestros vecinos.

En España tenemos pruebas suficientes y acciones cada vez más frecuentes de que el Islam nos tiene en el punto de mira. No ha mucho han matado un sacerdote e intentaron ampliar el resultado, Mientras tanto el Gobierno, lejos de proteger a los españoles y plantar cara a los hijos de Mahoma les apoyan y facilitan el camino. Es una evidencia demostrada que los españoles enemigos de su Patria –los separatistas vascos y catalanes y los rojos de Podemos—son la quinta columna y los más eficaces colaboradores de la invasión musulmana. Los partidos políticos que dicen defienden a España deberán tener como un primer objetivo liquidar la nueva “Invasión mora”, más peligros incluso y difícil de vencer que la mandada por Tariq-ibn-Ziyad. Si los españoles son tan necios que no entienden lo que les espera si no se la aplasta cuando es posible, dentro de pocos años será absolutamente imposible no ser esclavo de la morería que bajo capa de “inmigración” prepara el desastroso fin de la que fuera la nación católica por antonomasia. En poco tiempo volveremos al siglo VIII… Por suerte para mí, ya no lo veré. Pero mis nietos serán sus víctimas como los tuyos. Invito a cuantos escriben a dejar los “temas sin sustancia” y a que dediquen su pluma a impedir un futuro desastroso para nuestra España. Algo sabemos los viejos. (Y encomiendo a los obispos que bajen de las nubes, de lo que no tiene culpa el Evangelio, pues “habemos” católicos con los pies en la tierra…)