Fernando Olea, a la izquierda; ocupando todo el centro, Nanda Agredano, ‘miembra’ activa de la Fundación Franco.

JN.- Fernando Olea ha sido cesado como coordinador de Vox en la capital malagueña. No esperen ustedes que la Gestora les cuente la verdad acerca de su cese, ya que es por todos sabido la pulsión al embuste de esta tropa mal avenida.

Si alguno creía que lo de este partido podía tener enmienda, espero que se hayan caído ya del guindo.

No se autoengañen más: la Gestora de Vox Málaga es ya parte del problema y no de la solución. En lo único que la Gestora está demostrando una cierta diligencia es en perseguir y señalar a los que se han atrevido a mencionar sus flagrantes errores. El problema para ellos es que la militancia, de forma abrumadoramente mayoritaria, le hemos dado la espalda. Y ellos lo saben.

Hablan de trabajar y de remar en la misma dirección, pero el centro de su trabajo es excluir a los mejores, a quienes pueden hacerles sombra.

El ejemplo se tiene en la gestión que están haciendo, no aportan nada nuevo, ninguna idea, ni siquiera la más mínima autocrítica por el desastre de las mesas informativas, donde hay más cargos que afiliados de base. Vox Málaga puede entrar en el libro Guinness de los récord como el único partido en el mundo que cuenta con más cargos que afiliados.

Si han tenido oportunidad de trabajar cerca de la Gestora con alguna responsabilidad, con la ilusión propia de un afiliado que se acerca a este proyecto para servir a España, lo habrás comprobado en primera persona. El desprecio absoluto a las personas a las que ellos ven como subordinados.

¿Por qué se oculta la verdad sobre el cese de Olea? ¿Están amparando un caso de agresión?

José Miguel Gutiérrez, en primer término.

Los datos que hemos podido recabar son los siguientes: El viernes 17 de junio, por la mañana, se esperaba la llegada de Iván Espinosa de los Moteros para participar en un acto en calle Larios que pondría fin a la campaña de las elecciones andaluzas. Se instaló una mesa informativa en la emblemática calle de la capital malagueña, con algunas personas atendiéndola.

El secretario provincial de Vox Málaga, José Miguel Gutiérrez, así como el coordinador de la zona centro, Fernando Olea, se hallaban en la mesa informativa. Tras una breve discusión, según los presentes, (AD no ha podido verificar este dato) Gutiérrez y Olea pudieron haber llegado a las manos, llevándose la peor parte el segundo. Se desconocen los motivos.

Tras estos hechos Fernando Olea denunció los hechos ante la Gestora y pidió la adopción de medidas disciplinarias contra el secretario general por la supuesta agresión (insistimos, AD se basa en el testimonio de algunos testigos; el propio Olea ha declinado dar su versión a este medio)

Ha pasado más de un mes y, fiel a la opacidad que caracteriza a la Gestora, lo único que sabemos es que se ha nombrado a una nueva coordinadora del distrito centro de Málaga. Se llama Gema Palomo, procede de Ciudadanos y es tan conocida por las bases como el rey de Losoto. Llama la atención que todos sus ex compañeros de Ciudadanos a los que hemos tenido acceso hablen mal de ella. Sabemos que es amiga de Xavi Altamirano, lo que no sabemos si interpretarlo como un punto a su favor. AD comprueba una información sobre su presunta estancia profesional en Roquetas (Almería).

Xavi Altamirano y Gema Palomo.

Así las cosas, nos apuntan que el partido no ha informado a Fernando Olea sobre la apertura o no de un expediente disciplinario a Gutiérrez. ¿Tienen derecho los afiliados a conocer los detalles reales de esta truculenta historia y el por qué del cese de Olea?

Según se nos apunta, Fernando Olea se puso una diana en el pecho el día que presuntamente difundió un articulo de AD, escrito por los críticos de Vox Málaga, titulado “Cobarde entre los cobardes“.