Sin estridencias ni sobreactuaciones. Sin sobresaltos y con un discurso firme y coherente, comprometido con la identidad cristiana de Cataluña, que da respuesta a los asuntos que la dirigencia política catalana ha encerrado bajo llaves, Eva Parera está ganándole cada día más terreno a Vox en Cataluña y no es exagerado afirmar que acaso estemos ante la nueva referencia de la derecha identitaria en Cataluña. Sin alharacas ni deposiciones verbales. Sin buscar el frentismo como norma y guía, yuxtaponiendo la acción política al compromiso ético con los valores del humanismo cristiano.

Eva Parera apunta directamente a la alcaldesa Ada Colau y al populismo en general cuando denuncia que “se han propuesto erradicar cualquier rastro de tradición cristiana en la ciudad, por no hablar de la hostilidad hacia el catolicismo que rezuman sus propuestas educativas”. Y añade: “Malbaratar recursos públicos para llevar a cabo acciones que ofendan a una parte importante de la ciudadanía no es normal”.

Esta pasada Navidad, la líder de Valents se enfrentó a la polémica regidora barcelonesa, epítome del sectarismo y la inutilidad política: “Los católicos no le decimos a la alcaldesa cómo debe vivir o celebrar la Navidad, por lo que esperamos que el Gobierno municipal no nos imponga cómo hacerlo. Solo le pedimos una cosa: respeto a las tradiciones. Son una herencia recibida a preservar, no a erradicar”.

“Sabemos que no nos va a felicitar la Navidad, igual que tampoco felicita otras fiestas cristianas; pero sí que felicitará a otras comunidades religiosas en sus festividades. Nosotros sí que le desearemos una feliz Navidad, esperando que algún día entienda que Barcelona es plural y diversa, pero que también tiene unas tradiciones que deben ser respetadas y divulgadas. Uno no puede amar lo que no conoce, ni defender lo que no ama”, añadió la líder de la nueva derecha catalana.

Ahora, el grupo municipal Valents, presidido por Eva Parera, ha impedido que el pleno municipal de Barcelona incluyera la lectura de una declaración institucional de reconocimiento del colectivo LGTBI+.

Fuentes de Valents han justificado el veto del grupo criticando que se quiera dedicar más dinero al colectivo LGTBI+: “No está justificado el incremento. Que se destine más dinero a becas de comedor, escolares, casas de verano para niños con discapacidad, más seguridad en las calles, facilitar el acceso a los parques a personas con discapacidad y hacer accesibles los centros deportivos para la gente mayor”.

Reacciones

El edil de Junts per Barcelona, Joan Rodríguez, ha lamentado el “veto reiterado” del grupo de Parera, que no estaba en su asiento, a la que ha advertido: “Si estuviera aquí, le diría a la señora Parera que los ‘valents’ no son ustedes, son los niños que se plantan contra el buying que sufren el colegio o el mundo del deporte, los adolescentes que reúnen el valor que se necesita para salir del armario o las mujeres que denuncian a sus maltratadores”.

Rodríguez ha acusado a Valents de tener miedo de perder sus escaños y votar por ello posiciones que gusten a la extrema derecha, “que algunos dicen que viene pero que ya tenemos aquí”. Desde su domicilio, tras dar positivo por covid, la concejala de ERC Elisenda Alamany también ha denunciado el veto en un mensaje en Twitter.

La declaración recogía el compromiso de trabajar para que Barcelona sea “un lugar seguro y amable en el que vivir la diversidad sexual, afectiva y de género de manera plena y normalizada”; incrementar “los recursos técnicos y económicos para el desarrollo de políticas para la diversidad; trabajar para concienciar a las entidades deportivas de Barcelona sobre el reconocimiento de los derechos LGTBI+ y organizar acciones de prevención y sensibilización sobre estos derechos.