Ir por lana y volver trasquilado
Covarrubias en su Tesoro, escribe: “Ir por lana y volver trasquilado; cuando uno piensa que ha de venir ganancioso de alguna jornada o trato, y vuelve con pérdida”.
Correas, en su Vocabulario de Refranes, dice que se aplica este proverbio “cuando uno fue a ofender y volvió ofendido; y acomódase a cosas semejantes, cuando salen al revés de lo intentado”.
Es un dicho muy antiguo; de él se hace mención en el Poema de Fernán González, y a él se alude en La Celestina, donde, por hacer chiste, se cambió el “trasquilado” por “sin pluma”: “En pensallo tiempo, no vayas por lana e vengas sin pluma”.
Sobre la historia o historieta que dio lugar a esta expresión, hay quienes opinan que lo de “volver trasquilado” hace alusión a la antigua pena de trasquilar a cruces, es decir, sin orden, cruzándose las tijeretadas al modo al que se trasquila a las ovejas, pena que se aplicaba a los blasfemos y a los judíos. A esta pena le llama el Fuero Juzgo “esquilar laidamientre”, y el Concilio IV de Toledo, turpiter decalvare.
No obstante esta opinión, existe una, mucho más antigua, según la cual, el proverbio que comentamos alude al carnero que se mete en rebaño ajeno y vuelve al suyo trasquilado.
En la Crónica general, obra del siglo XIII, impresa en 1541, se lee lo siguiente:
“Fue y allí engannado, ca le acontesció, según dize el proverbio, como el carnero que va a buscar la lana agena et viene dallá tresquilada la suya”.
El ya citado maestro Correas confirma esta alusión al incluir en su Vocabulario de Refranes uno que dice así: “El carnero encantado, que fue por lana y volvió trasquilado”.
Quizás le pase esto a la izquierda española con su obstinación de conformar dios sabe qué estado o república federal o confederal: que salga trasquilada.
*Teniente coronel de Infantería y doctor por la Universidad de Salamanca.
Lo de enfrentarse a la izquierda tiene mal arreglo por una simple cuestion de tiempo, nosotros las personas honradas estamos obligados a trabajar duramente un monton de horas al dia para pagar la comida, el alojamiento, el transporte y el resto de gastos de la vida, en cambio los de izquierdas como viven de subsidios, ayudas, subvenciones, estafas, robos y trapicheos disponen de un monton de tiempo libre para hacer terrorismo urbano de baja intensidad y apoderarse de las calles de manera violenta hasta el punto de que a dia de hoy para poder pasear con una bandera rojigualda en… Leer más »