UE: ¿el aborto como derecho?
Rosana Ribera de Gracia.- Parece algo lejano… pero si no hacemos nada, los lobbies internacionales pro-aborto arrasarán Europa para eliminar cualquier restricción existente al aborto, y ampliar sus condiciones para que ninguna mujer elija la vida frente a la muerte.
Se trata del informe Matic, que contiene una serie de recomendaciones para los estados europeos y que este 7 de junio se vota en el pleno del Parlamento Europeo. Y este informe contiene el ataque más agresivo contra la vida de los bebés no nacidos que se haya visto nunca en los organismos de la UE. ¿Por qué?
Porque pretende definir el aborto como un “derecho humano” y a la vez eliminar cualquier restricción temporal que hayan impuesto los estados -por ejemplo, en España son 14 semanas de aborto libre-.
Así, este informe se utilizará para promover, e imponer en España y Europa, el aborto libre a lo largo de los 9 meses de embarazo, para niñas de todas las edades y sin ningún tipo de consentimiento paterno. Y por supuesto, pagado con tu dinero y el de todos los contribuyentes.
El informe ataca todas las leyes provida de Europa, afirmando que la protección de la vida desde la concepción es “una violación de los derechos humanos y una forma de violencia de género”, e insta a los Estados miembros a “eliminar y combatir los obstáculos al aborto legal”.
El aborto no es más que una cosa: el acto de acabar con la vida de un ser humano inocente e indefenso. Además, el aborto tiene varias consecuencias negativas para las mujeres. Al contrario que el Informe Matic, muchos países todavía siguen protegiendo la vida humana.
No existe tal derecho en ningún tratado internacional. Y el Informe Matic es un intento más de conseguir el reconocimiento internacional del aborto como “derecho humano”.
No existe tal derecho, ni puede derivarse de la Declaración Universal de los Derechos Humanos o de la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea. Es escandaloso y totalmente inaceptable que el Parlamento Europeo intente promover el aborto -el acto de acabar con la vida de un ser humano inocente- como un “derecho humano”.
Por el contrario, desde la Conferencia de El Cairo de 1994, los Estados se comprometieron a “reducir el recurso al aborto” y a “tomar las medidas adecuadas para ayudar a las mujeres a evitar el aborto”.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos y el Tribunal de Justicia de la Unión Europea se han negado sistemáticamente a reconocer la existencia de un “derecho” al aborto.
El objetivo del Informe Matic es hacer imposible que los médicos provida se opongan a matar a un ser humano mediante el aborto. Según el informe, negar el aborto por parte de un médico será considerado “como una negación de la atención médica”. Así, si un médico dijera NO al aborto, significará el fin de su carrera.
Aborto y anticonceptivos para todas las niñas “independientemente de la edad” y sin el consentimiento de los padres.
Adoctrinamiento LGTB y de género desde la escuela primaria sin informar ni exigir el consentimiento de los padres.
Cirugías irreversibles del llamado “cambio de sexo”, incluso para menores de edad, todas ellas pagadas por los sistemas públicos de salud.
La injerencia en la competencia exclusiva de los Estados miembros sobre sus políticas y su gestión de los sistemas sanitarios nacionales.
El coautor intelectual de este ataque pro-aborto es Neil Datta, director ejecutivo del Foro Parlamentario Europeo sobre Derechos Sexuales y Reproductivos.