LDD.- El juicio por la muerte del delincuente afroamericano George Floyd empezó hace ya más de un mes pero las últimas revelaciones en el caso, presentadas por el abogado del policía acusado por asesinato, indican que su muerte tuvo más que ver con sobredosis de drogas que con la maniobra que le estaba aplicando.

El ex-oficial de policía Derek Chauvin, quien aparece en el famoso video grabado por un transeúnte con su rodilla sobre el cuello de Floyd (aunque otros videos demuestran que en realidad tenía la rodilla sobre el omóplato), es quien se encuentra siendo juzgado.

Los otros 3 policías que participaron del arresto serán juzgados en un juicio por separado, con penas menores, y este comenzará en agosto.

Para el juicio de Chauvin, que comenzó el 11 de marzo con el proceso de selección de jurados, fueron 15 los ciudadanos seleccionados para integrar el panel y se encargarán de llegar a un veredicto. La identidad de los jurados todavía no ha sido develada, ya que todos afirmaron que están preocupados por su integridad física si declaran inocente a Chauvin.

Ellison posando con líderes del grupo terrorista de izquierda y con el libro de Antifa.

Unos días atrás, en medio del proceso de selección de jurados, la municipalidad de Minneapolis, ciudad donde ocurrió el hecho, le pagó a la familia de Floyd una indemnización de 27 millones de dólares, la más alta pagada en la historia por parte de un gobierno local.

Chauvin está acusado de asesinato en primer y segundo grado y su defensa está siendo liderada por el abogado local Eric Nelson.

Por su parte, el equipo de la Fiscalía está siendo liderado por el Fiscal General del Estado de Minnesota, Keith Ellison, un confeso militante de la ultra-izquierda del Partido Demócrata y seguidor del grupo terrorista Antifa.

Contrario a lo que los medios indican, el caso es mucho más complicado de lo que se cree, y hay fuertes evidencias que prueban que el deceso de Floyd se produjo por una sobredosis de drogas que él mismo ingirió mientras estaba en el auto, combinado con un cuadro de COVID-19 que acababa de superar y problemas crónicos de corazón.

Ellison sabe mejor que nadie que una condena en el caso no está asegurada y es por esto que días antes que empiece el juicio decidió apartar a todos los fiscales que estaban asignados al caso y reemplazarlos con un dream team legal formado por exclusivamente por 15 prestigiosos abogados del sector privado.

Ellison, además, ya anticipó que pedirá 50 años de prisión para Chauvin si es encontrado culpable.

Ellison está tratando de convencer al jurado que Floyd murió asfixiado por la maniobra del policía mientras se encontraba en esposado en el suelo.

Para esto citó a múltiples médicos que presentó como testigos estrella.

El neumólogo Martin Tobin respaldó la teoría de la Fiscalía y afirmó que Floyd murió por falta de oxígeno debido a que la rodilla de Chauvin se encontraba obstruyendo la vía respiratoria del delincuente.

Esta falta de oxígeno le habría causado un daño cerebral y una arritmia en el corazón que hizo que hizo que Floyd falleciera a los 5 minutos luego del arresto.

Según Tobin, los problemas crónicos de salud de Floyd y su ingesta de drogas nada tuvieron que ver.

Tobin fue uno de los testigos más eficaces, pero su credibilidad y teoría están en en duda luego del testimonio del doctor Andrew Baker, el médico que le realizó la autopsia oficial a Floyd.

Baker no menciona en su informe que la muerte se haya producido por falta de oxígeno, sino que el deceso ocurrió por un paro cardiorrespiratorio causado por la sobredosis de fentanilo. La maniobra del policía, y todo el proceso del arresto, habrían puesto más nervioso a Floyd y esto pudo tener un factor en el paro cardíaco pero sus problemas de corazón severo y los altos niveles de droga en sangre que tenía fueron las causas principales que contribuyeron al desenlace fatal.

Los hallazgos en la autopsia que Baker encontró no pueden ser ignorados: Floyd tenía en su cuerpo una ingesta de fentanilo cuatro veces más de lo que un ser humano puede soportar. El informe indica que tenía 11mg/L, y una persona común muere por sobredosis a partir de los 3mg/L.

Esto quiere decir que probablemente si Floyd no hubiera sido arrestado, se hubiera muerto de una sobredosis de fentanilo sentado en su auto.

Los testimonio de Tobin y Baker, –ambos testigos estrella de la Fiscalía– se contradicen totalmente.

La novia de Floyd, quien lo acompañaba en sus adicciones, Courteney Ross, también fue llamada al estrado por la Fiscalía y su testimonio no hizo más que acrecentar la teoría de la sobredosis.

Ross estaba en el auto con Floyd cuando ocurrió todo el altercado con la policía, y en los videos se la escucha claramente diciendo “él no está bien” y diciéndole “si no te tranquilizas te vas a morir”.

En el juicio, testificó que tanto ella como Floyd tenían un pasado de drogadicción, y que en marzo del año pasado, 2 meses antes de su muerte, Floyd había sufrido una sobredosis de drogas en su casa por la cual tuvo que ser llevado al hospital y casi muere.

En complemento con el testimonio de Ross también estuvo el de Christopher Martin, un joven de 19 años empleado del comercio donde Floyd intentó pagar un paquete de cigarrillos con una billete falso de 20 dólares y agredió a los comensales.

Martin fue quien llamó a la Policía por este altercado, por lo cual afirmó que siente una enorme culpa de hacerlo viendo el posterior desenlace que esto produjo.

De todos modos, durante el interrogatorio del abogado de Chauvin, Martin testificó que durante su interacción Floyd “parecía muy drogado”, y que tenía un comportamiento errático y que se le veía salir una especie de espuma de su boca—un clara señal de alguien que está a punto de sufrir una sobredosis.

La defensa de Chauvin tuvo muchos puntos fuertes, y presentó evidencia que no hizo más que socavar la hipótesis del asesinato.

La filmación proveniente de la cámara de cuerpo de unos de los 4 policías que participó del arresto captó el momento cuando Floyd le cuenta a los oficiales de manera histérica y gritando que “ingirió muchas drogas”.

Desde esa misma grabación se puede observar claramente que la rodilla de Chauvin ni siquiera estuvo en el cuello de Floyd como la mayoría de la gente piensa, si no que estuvo sobre su omóplato.

Los superiores de Chauvin, incluyendo el Jefe de la Policía de Minnesota Medaria Arredondo, testificaron primero para la fiscalía que la maniobra que es ilegal en el Estado y constituía un abuso policial.

Sin embargo, el abogado de la defensa consiguió que Arredondo admitiera que la rodilla de Chauvin estaba en el omóplato y no en el cuello de Floyd, lo que constituye una maniobra policial legal y tira por la borda todo el caso de la fiscalía.

Pero hay más: el auto de Floyd estaba lleno de píldoras de fentanilo que fueron encontradas durante la investigación y es que, al momento de su arresto, Floyd se encontraba con un acompañante; nada más y nada menos que su dealer (vendedor de drogas).

Morries Hall es el nombre del narcotraficante que se encontraba como acompañante en el auto junto a Floyd y a su novia.

A su vez, es él quien le dio la idea a Floyd de pagar con un billete falso en el local donde fue a comprar, posiblemente porque Floyd había gastado todo su dinero en la compra de drogas. Se baraja también la posibilidad de que el billete falso haya sido proporcionado por el mismo Hall.

La novia de Floyd había testificado anteriormente que tanto ella como Floyd le compraban las drogas a Hall.

Como era de esperarse, Hall –desde la cárcel ya que se encuentra detenido por otro delito– se negó a testificar, asegurando a que si lo hace podría auto-incriminarse como el principal responsable de la muerte de Floyd, por haberle proporcionado las drogas.

Se espera que el juicio continúe al menos 2 semanas más. La Fiscalía terminará de exponer su caso el martes, en donde la defensa tomará la posta y presentará sus propios testigos.

Sea cual sea el veredicto, queda más que claro que la prensa nuevamente les mintió a los ciudadanos, y que el caso que envuelve la muerte de Floyd es mucho más complicado de que lo se cree.