Begoña Vila*.- Recordemos aquellas reuniones de las conferencias de presidentes en plena pandemia en las cuales es titular de la Xunta de Galicia Alberto Núñez Feijóo transmitía reiteradamente al gobierno de Sánchez su rechazo al uso desproporcionado en el tiempo del Estado de Alarma por inconstitucional, ya que no tenía límite en el tiempo.

Las palabras de Núñez Feijóo en aquellos momentos fueron muy claras. Sostuvo que no se podía mantener prisionera a la población mientras planeaba sobre España la amenaza de la mayor crisis económica, que generaría, como así ha sido, miles de parados, pobreza y desigualdad social. Añadía que no se podía “prorrogar sine die” dicho Estado de Alarma. Insistía la Xunta de Galicia en que una de las alternativas para garantizar esa desescalada eran los cambios en la Ley Orgánica de Salud. Incluso afirmaba que, más que un Estado de Alarma, el Gobierno de Pedro Sánchez estaba sometiendo a la población española a un Estado de Excepción. Aquellas palabras toman fuerza ahora, porque efectivamente el Estado de Alarma lleva prorrogándose un año.

El presidente de la Xunta de Galicia envió esta propuesta al Gobierno social comunista sin éxito alguno.

Hoy se aprueba dicha modificación en la Ley General de Salud acompañada por una campaña de linchamiento en redes sociales contra el Gobierno de Galicia. La llaman frívolamente “Ley Auschwitz”, faltando así al respeto a la mayoría de la población gallega que, durante cuatro años consecutivos y en los peores momentos sanitarios, económicos, dio su confianza al Partido Popular.

Estas graves acusaciones amparadas por la libertad de expresión y no por el delito de odio. Como ese por el cual el director de este medio, Armando Robles, fue detenido a petición de la fiscal del odio de Málaga, María Teresa Verdugo, por sus declaraciones en contra del terrorismo islámico, llegando a pedir incluso el cierre de este medio de comunicación. Pero ahora, en cambio, todas esas plataformas y grupos organizados, que se han dedicado a expandir bulos y “kake news” sobre esta reforma de la ley gallega de Salud, afirmando por ejemplo que en Galicia se pueden hacer detenciones de civiles en centros de aislamiento, campos de concentración, expropiación de empresas, hospitalización forzada, incluso tratamientos médicos obligatorios de aquellas personas contagiadas por Covid… parecen amparadas por el derecho a la libertad expresiva que, en cambio, no tuvo el director de AD al ser detenido.

La pregunta que planteamos es la siguiente: ¿a la izquierda le interesa el sorpasso de Vox al Partido Popular? La respuesta podría ser afirmativa. El Partido Socialista sabe que los de Abascal tiene un techo de cristal en cuanto a voto se refiere y que con un Vox hegemónico dentro de la derecha, tendría más fácil perpetuarse en el Gobierno.

Por parte de estos grupos de derechas, no hubo una campaña tan feroz ni en los peores momentos de la gestión de la crisis sanitaria por parte del gobierno de Sánchez. Comparar Galicia y a su gobierno con la Alemania nazi retrata la peor condición del alma humana. Los gallegos no olvidan y se lo harán pagar en las urnas. Más allá del “mucho ruido y pocas nueces”, no dan con la tecla en Galicia.

*Delegada de AD en Galicia