El esperpento que no cesa: Vox Málaga anuncia al bombero torero como su fichaje estrella
AD.- Uno de los rasgos distintivos de la España actual es que la mediocridad triunfa siempre sobre el genio. En España impera la mediocridad porque las élites lo son gracias a los privilegios y no a los méritos ni el esfuerzo. Claude Chabrol dijo aquello de que “la mediocridad es mucho más fascinante que la inteligencia, porque la inteligencia tiene límites pero la mediocridad no”. Los mediocres se han apoderado de España y lo han cambiado todo, desde la política a la religión, sin olvidar los valores, las costumbres y las leyes. Todo está dominado por esa plaga, la peor y más dañina de todos los tiempos. Los partidos políticos son la gran expresión del triunfo de la mediocridad en la España actual.
El caso más representativo es el de “Barbie”, una nulidad integral que, sin embargo, fue elegida candidata de Vox al Congreso por razones que siguen sin ser debidamente esclarecidas. No encontrarán nada en ella que sea genial, ni siquiera original. No encontrarán una sola intervención suya que no sea leída. No hallarán nada sobresaliente en su currículum. Ella sin embargo es la que manda y da las órdenes en Vox Málaga. Su testaferro Antonio Sevilla es solo un líder de pega que calla y traga con todo. El liderazgo fáctico de “Barbie” está surtiendo el efecto de tener cabreado a casi todo el mundo. El día que se reparta el último cargo, las expectativas no cumplidas de muchos será la llave que abrirá la caja de truenos. Y le estallará al pelele, sin que entonces “Barbie” se atreva a dar la cara. Que un personaje mediocre como “Barbie” siga gozando de la respetabilidad oficial que le confiere su cargo, sin embargo sus efectos devastadores para el partido, son la prueba irrefutable de la perversión de un sistema político que es al buen gobierno, a la eficacia y a la mejora de los ciudadanos lo que esta pandemia al turismo.
El último disparate de “Barbie” y su marioneta ha sido la designación de José Antonio Macías nada menos que para el puesto de coordinador de zona. ¿Y quién es Macías? De entrada, alguien que valida la leyenda del amiguismo en la designación de los cargos en Vox, lo que deshonra a sus despreciables autores. Quien tendría la obligación de aclarar la elección del bombero es Antonio Sevilla. Pero Sevilla no da la cara, y en cambio deja que se la partan por quien vale menos que él.
Unos nacen para realizar empresas, y otros para elaborar conceptos. Se puede decir que José Antonio Macías, el amiguísimo, no ha nacido ni para una cosa ni para la otra. Lo suyo era apagar fuegos, aunque en las últimas horas los esté avivando. Es casi seguro que el bombero nunca habría llegado a ser coordinador de zona sin esa buena estrella que consiste en que te lo den todo hecho sin haber demostrado nunca nada.
En las elecciones municipales de 2018 fue designado a dedo como número tres en la lista de Vox por Torremolinos. Le pareció que el número 3 no sublimaba suficientemente su vanidad y rechazó el ofrecimiento, dejando plantado al partido y a sus compañeros. A cualquier otro, el partido lo habría despachado con un manguerazo en el culo, pero a éste, en compensación, le ofrecieron el número dos en las listas de la vecina Benalmádena. Era un puesto de salida, según las encuestas. Ser un simple concejal de Vox en la oposición le obligaba, sin embargo, a renunciar a su sueldo y puesto de bombero y acogerse a los mil euros retribuidos por el Ayuntamiento benalmadense; o bien a renunciar al sueldo mileurista de edil y compartir su actividad municipal con la profesional. Tal vez, por designio de Dios, el alma del bombero Macías no soportaba como Purgatorio eso de trabajar gratis por España. Así que renunció también al número dos por Benalmádena, dejando al partido en el municipio hecho unos zorros. Su baja la cubrió Miguel Ángel Jiménez, el ex coordinador de Vox que vendió su primogenitura a la “poni” por un plato de lentejas agusanadas. Desde entonces, Vox Benalmádena ha transitado de lío en lío, con la mayor parte de la militancia más fuera que dentro del partido.
Aunque muchos confían en que esta vez perdurará en Macías la vocación de apagafuegos antes que la de pirómano, el desastre que provocó su insaciable ambición económica le invalidan para el cargo. Hay muchos rastros humeantes de su negligencia. Si Sevilla aspira a que Vox Málaga no se desintegre en bandos y bandadas, que se imponga de una vez ante “Barbie” y exija la presencia en el organigrama orgánico de la gente más valiosa y experimentada, que es la que incomprensiblemente no ha sido tenida en cuenta. Esa gente es la única que puede poner orden y convencernos a nosotros de que al fin Vox ha elegido la opción más fiable y juiciosa. De Antonio Sevilla depende.
Los defectos de la cultura permanecen como los defectos del carácter de las personas porque producen círculos viciosos en los que se retroalimentan. Lo que martiriza desde tiempos remotos a los genios españoles son muchas cosas, pero sobretodo es el enemigo interno, que es la envidia. Que por alguna razón que se desconoce, parece ser mayor que la de otras culturas europeas. No nos duele tanto a los españoles cuando desde afuera se ataca España, porque nosotros mismos ya atacamos España más que desde afuera. La primera es una ventaja accidental lo que hace que parezcamos muy seguro de nosotros… Leer más »
Es de vergüenza que un tipo que deja tirado al partido por DOS veces vuelva a formar parte de la estructura. Es un insulto al afiliado honrado de VOX en Málaga. ¿No hay otras personas que estén capacitadas y con mayor ilusión por trabajar en el partido?
Lo dicho, es una auténtica vergüenza.
Que se le debe a esta gente para esto!!
Hay quienes fichan al autor de 40 asesinatos, a violadores, atracadores, secuestradores y pederastas y ni les tuerce la mirada por ello
Macías nos dejó con el culo al aire. Muchos de los errores que le achacan a Lara fueron por culpa de Sevilla, como este y el de Lucía Cuín. El bombero es íntimo de Antonio Sevilla y como él, un vago pero encima con mala fama. Tanta entrevista de la Rueda y tanto currículo para esto