Diez razones para no votar a José Enrique Lara, el hombre que ha fracturado a Vox en Málaga a golpe de dedazo: Avales con trampa (V)
LR.- En las elecciones municipales del 26 de mayo del pasado año, tras muchos años de presidente provincial de VOX Málaga, José Enrique Lara solo consiguió presentar listas en Málaga capital, Alhaurín de La Torre y El Grande, Antequera, Benalmádena, Cártama, Estepona, Fuengirola, Manilva, Marbella, Mijas, Nerja, Rincón de La Victoria, Ronda, Torremolinos, Vélez Málaga y Benahavís. 17 municipios de un total de 103 existentes en la provincia.
En una entrevista en esRadio el día 14 de septiembre, Lara presumía de tener implantación en el 95% de los pueblos malagueños. ¿Cómo era posible? El todavía presidente provincial de Vox en Málaga debió correr como un Fórmula 1 para nombrar coordinadores con el posible objetivo de lograr los avales en las primarias. Si hubo promesas incumplidas a los nuevos coordinadores, solo ellos lo saben. En cualquier caso, es lícito poner en cuestión la legitimidad de los respaldos logrados por Lara para seguir en liza electoral.
Como muestra, este botón: La mayoría de los firmantes de los avales de Lara cuenta con menos de de tres meses de afiliación. Curiosamente, estas incorporaciones coincidieron con la caída en picado del número de militantes en Málaga. ¿Qué se les prometió? En cualquier caso, es preciso que estos nuevos militantes conozcan cómo se las gasta el todavía líder de Vox en la provincia. Hablemos por ejemplo del “caso Cuín” en Torremolinos, que permitió al PSOE hacerse con la Alcaldía de ese municipio.
José Antonio Macías, amigo de Lara, había sido elegido para ocupar el segundo puesto de la lista propuesta para el Ayuntamiento de Torremolinos. Finalmente, ese puesto fue a parar a una joven desconocida, Lucía Cuín por decisión personal de Lara. Todavía no ha explicado a los militantes los motivos por los que Cuín ocupó un puesto de salida, con apenas un mes de militancia. En una localidad donde todo el mundo se conoce, ¿desconocían Lara y su lacayo Antonio Sevilla, alcaldable de Vox, que Cuín es la pareja sentimental de un alto cargo del PSOE en Torremolinos? ¿Por qué no aclaró Lara si son ciertas o no las acusaciones de algunos críticos que relacionan la incorporación de Cuín al pago de un favor personal al padre de la díscola edil?
La designación como número dos de la joven expepera obligaba a desplazar a José Antonio Macías al puesto número 3 de la lista. Para solucionar el embrollo, Lara pretendió colocar a su amigo de número 1 en la lista de Vox en el vecino municipio de Benalmádena, un día antes de las presentaciones de listas en la provincia, y destrozando así el trabajo de meses del entonces coordinador, Miguel Ángel Jiménez.
La rebelión de los militantes en Benalmádena impidió a Macías convertirse en alcaldable. A lo más que estaban dispuestos era a permitir su incorporación en las listas electorales de número 2. El torpe “dedazo” de Lara logró romper al eficiente equipo de Vox en Benalmádena. Por si fuera poco, el recomendado de Lara abandonó el buque a los dos meses. El partido que lidera Abascal es hoy un grupo fragmentado y socialmente residual en ese municipio, gracias a la clamorosa incompetencia de Lara y a su percepción del partido como un predio particular.
Los nuevos afiliados de Vox harían bien en informarse acerca de la proverbial incompetencia de Lara y su pulsión al “ordeno y mando”. Cosa que toca en Vox, cosa que destruye. Lograr los avales de una forma tan presuntamente ilícita lo deslegitima para ser presidente de Vox en Málaga. Lara es un pésimo gestor y una rémora para el crecimiento de Vox en Málaga. Los militantes tienen ahora la oportunidad de acabar con una desastrosa gestión que ha sido un auténtico desdoro para la imagen del partido verde.