La falta de medidas del Gobierno para evitar la entrada en España de personas contagiadas con el virus del coronavirus ya se traduce en centenares de muertos y contagiados. Tampoco se entiende la inacción de la oposición, sobre todo si la comparamos con la beligerancia mostrada por el PSOE contra las administraciones gobernadas por el PP con ocasión del ébola.

España es ya el quinto país del mundo en número de muertos por el virus chino. Y no es por casualidad. Pedro Sánchez, negaba el pasado 13 de febrero que el coronavirus fuese un problema de salud público en España. Lo hacía tras conocer la suspensión del Mobile World Congress de Barcelona. Ese mismo día, tal y como ahora ha quedado acreditado, se producía en España la primera muerte por coronavirus.

El Gobierno de Sánchez defendió que la cancelación de la feria tecnológica de Barcelona respondía a una decisión de las empresas del sector, pero «de acuerdo a los expertos y la información disponible, no responde a razones de salud pública en España». Así lo publicó el presidente en su cuenta personal de Twitter el mismo día 13 de febrero, nada más conocer la cancelación del evento:

Pese a que el Gobierno negaba cualquier problema público de naturaleza sanitaria, ese mismo día se registraba en Valencia la primera muerte por coronavirus de toda España: un hombre de 69 años que falleció en el Hospital Arnau de Vilanova (Valencia) el pasado 13 de febrero.

Esa muerte ha revelado que el virus Covid-19 estaba presente en España sin que las autoridades sanitarias tomasen medidas, ya que no fue hasta el 27 de febrero cuando Sanidad cambió su protocolo para analizar también a posibles fallecidos por afecciones respiratorias de origen desconocido, como era este caso.

«En España ni hay virus, ni se está transmitiendo, ni tenemos ningún caso», aseguraba el 23 de febrero el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Comité de Seguimiento del Coronavirus en el Ministerio de Sanidad. La preocupación del ministerio se dirigía por entonces a Italia, país donde ya se habían confirmado numerosos contagios, y también a Irán.

No fue hasta el pasado 27 de febrero, 14 días después del fallecimiento, cuando el ministerio cambió los protocolos para la detección del virus y se incluyó también la realización de análisis a fallecidos por «infección respiratoria aguda con criterios de gravedad». Es decir, a ingresados de neumonía, síndrome de distrés respiratorio agudo, fallo multiorgánico, shock séptico, ingreso en la UCI y también en casos de fallecimiento.

Una vez más, se antepuso el buenismo a la seguridad colectiva de los españoles. La fivolidad con la que el Gobierno ha jugado con la salud de los españoles deberia ser en estos momentos el eje del ebate político.

Debemos señalar también a la oposición por su silencio ante la gestión de la crisis por parte del Ejecutivo. Si fuera al revés, si ahora el PP estuviera al frente del Gobierno, la izquerda estaría en pie de guerra. Con ocasión del brote de ébola, que en España no tuvo ninguna víctima mortal, solo les faltó acusar a Rajoy de haberlo creado. Por eso no se entiende el silencio del PP, cuyo presidente, Pablo Casado, está demostrando ser aún más cobarde e inútil que Rajoy

Otros trece muertos

Trece personas con coronavirus han fallecido este lunes en España, el día más negro desde que se han registrado muertes entre personas que presentaban el virus, con lo que la cifra total de muertes asciende a 30. Todo ello en una jornada en la que los casos positivos han superado ya los 1.000 tras registrarse casi 400 contagios especialmente en la Comunidad de Madrid (267 más), País Vasco (57 nuevos casos) y Cataluña (23).

En Madrid, han fallecido este lunes ocho personas entre 73 y 99 años, todos ellos con patologías previas. La región registra ya un total de 16 muertos y ha pasado en un día de 202 casos hasta los 469 que ha reportado la Consejería de Sanidad, duplicando en 24 horas sus registros. Como medida, la Comunidad ha restringido las visitas a las residencias de mayores.

En el País Vasco, la muerte de una persona en Guipúzcoa ha elevado a seis el número de fallecidos, siendo la segunda región que registra más muertes y, también, más contagios: 148 frente a los 102 que había confirmados el domingo.

Este lunes, el Gobierno vasco ha decretado el cierre durante 15 días de todos los centros educativos, públicos y privados, de Vitoria por la proximidad a la localidad riojana de Haro, donde hay una treintena de casos.

Tanto Madrid como País Vasco preocupan especialmente al Ministerio de Sanidad, que considera que su situación es “diferente” al resto de España porque en ellas existen “focos de transmisión comunitarios”, es decir, contagios locales que no se pueden comparar al resto de España.

Dos fallecidos en Cataluña y otro en Aragón

En Cataluña, este lunes por la tarde se confirmaba el fallecimiento de un hombre de 97 años y una mujer de 88, con lo que los fallecidos en esta comunidad autónoma ascienden a tres.

En esta región, la conselleria de Salut ha informado de 23 casos nuevos de contagio, entre ellos un bebé de seis meses y otro de un año de edad, que están aislados en su casa en estado leve. En total, son 101 personas contagiadas y estos dos bebés son los primeros de Cataluña, aparte de la menor de 16 años de Gerona también contagiada.

Mientras, la dirección general de Salud Pública del Gobierno de Aragón ha confirmado la tercera muerte en la región, la última la de un hombre de 93 años que vivía en la residencia en la que se han dado buena parte de los casos de la Comunidad autónoma. La cifra de contagios se eleva a 32.

Hasta la fecha, son ya 29 las personas fallecidas con coronavirus en España: 16 en la Comunidad de Madrid, seis en País Vasco, tres en Cataluña, tres en Aragón y una en la Comunidad Valenciana.