¿Qué son las flores de Bach y para qué sirven?
Es un remedio muy popular en muchos países que sirve para combatir emociones negativas de la forma más natural.
Las flores de Bach también son reconocibles por el nombre de remedios florales. Se trata de un conjunto de esencias naturales que sirven para hacer frente a situaciones de inestabilidad anímica. Pertenecen al grupo de la medicina alternativa, por lo tanto, no se trata de un medicamento ni tiene acciones fisiológicas ni biológicas.
Existe un total de 38 flores o remedios que nos ayudan a equilibrar las diversas emociones negativas frente a las que nos podemos encontrar. Miedo, desconfianza, etc…, son sentimientos más comunes de lo que parece, y de esta manera, les podemos hacer frente de forma natural.
Origen de las flores de Bach
Para conocer el inicio de las flores de Bach hemos de remontarnos a los años 30. En 1934 el Dr. Bach dió con la metodología, casi artesanal, para dar origen a estas flores cuando se mudó a un jardín que se encuentra en Mount Vernon, Inglaterra. Con el paso de los años ha logrado llegar al gran punto de comercialización del que disfruta a día de hoy.
Actualmente, el jardín sigue en perfecto estado y en él continúan creciendo flores y plantas óptimas para la creación de las flores de Bach. Además, los herederos a los que el doctor dejó a cargo la producción, siguen trabajando para que se sigan generando unas flores que den el mismo resultado que siempre, con la garantía de calidad que tienen desde su origen. Las instrucciones de Bach fueron muy claras: que se mantuviese el estilo y la sencillez que él mismo había logrado.
A día de hoy, se siguen creando y compartiendo estas flores de Bach, y tienen mucha popularidad entre los millones de personas que las siguen usando. Más de 50 países reciben este producto con asiduidad, y conocen y disfrutan de sus beneficios.
¿Para qué se usan?
Para entender su comportamiento hemos de entender primero la filosofía y forma de ver la vida del Dr. Bach. Él pensaba que los problemas de salud se catalogaban en 7 tipos de emociones: desánimo y desesperanza, hipersensibilidad al entorno, soledad, sensibilidad hacia los demás, miedo y falta de interés por el presente, e incertidumbre.
Pues bien, con las flores de Bach encontramos una alternativa para tratar y regular todas esas sensaciones sin tener que recurrir a la medicina tradicional. Traumas, astenia, ansiedad, son muchos los trastornos que pueden impedirnos llevar nuestra vida con la máxima regularidad, por lo que este producto nos ayudará a calmarnos y corregir determinados factores que juegan en contra de nuestra estabilidad emocional.
Realizando un test de flores de Bach, podremos descubrir cuál es la flor que mejor se adecúa a aquello que nos ocurre o inquieta y, de esta forma, saber cuál es la que mejor nos puede ayudar. De esta forma ahorraremos mucho tiempo y podremos solicitar nuestra flor de forma online, cómodamente y sin margen de error.
Sin embargo, existen también unos preparados básicos que sirven para alteraciones que surgen de lo cotidiano, puede ser por ejemplo, debido al estrés antes de un exámen o por una falta de autoestima que no podemos comprender.
¿Cómo se usan?
El truco para potenciar su poder está en exponer la flor al sol junto con el agua del rocío, durante un tiempo que varía dependiendo del tipo que estemos tratando.
Existen 38 tipos de flores que combinadas entre sí dan lugar a muchísimas opciones diversas, aunque su sencillez en el proceso hace que cualquier persona pueda hacerlo. Si queremos mezclarlas entre ellas podremos hacerlo, pero es conveniente consultar antes con un terapeuta floral para que nos oriente y aconseje para que el proceso continúe siendo eficiente.
A la hora de ingerirlas, es tan fácil como poner unas gotas del tratamiento debajo de la lengua, lo que hará que éstas sean absorbidas de manera rápida y efectiva.