Las “tetas” de Lluís Salvadó
Xavier Rius*.- Vaya por delante que lo de Lluís Salvadó me parece una conversación privada. Como aquella de Trump, por cierto. Con la diferencia que la del presidente norteamericano es del 2005 -ni siquiera era candidato- y la del primero es de ahora. Salvadó era el número dos de Economía y el tres en el partido.
Pero que levante la mano el tío que no ha hecho nunca un comentario machista -incluso guarro- sobre el sexo opuesto: que si unas buenas tetas, que si un buen culo o que si unas piernas largas. Podríamos recurrir a aquella cita bíblica: el que esté libre de pecado que tire la primera piedra.
Lo más divertido ha sido, sin embargo, como el soberanismo se ha lanzado a exculparlo. Una mujer a sueldo de la Corpo como Empar Moliner -en otra época feminista y progre- ha dicho que la culpa es de Tabarnia. Toni Soler ha salido tamién en su defensa en su artículo de este domingo en el Ara. Y Euard Voltas ya le dio la razón en twitter el sábado por la noche. Faltaría más. Como se nota que todos están en la órbita del proceso.
No quiero ni pensar que hubiera pasado si el pillado in franganti hubiera sido Xavier García Albiol, por ejemplo. Lo crujen. O cualquier otro dirgiente de lo que llaman despectivamente -hasta medios oficiales- el bloque del 155: PP, Ciudadanos o el PSC. Pérfidos unionistas.
Puigdemont estaría haciendo tuits como un loco desde Bruselas diciendo que España es como Turquía. Tardà y Rufián se hubieran puesto las botas. En TV3 habrían abierto el TN mediodía y noche. Marta Rovira habria pedido ya la dimisión. Creo que Salvadó, que fue cabeza de lista por Tarragona en las últimas elecciones, permanece en su puesto. No sea que tenga que buscar trabajo.
En cambio, aquí, TV3 mecionó la polémica pero ni siquiera reprodujó -por escrito o en audio- las declaraciones. Los telespectadores que no se hubieran informado por otras cadenas o medios no sabrían a que parte del cuerpo se refería Lluís Salvadó. Suerte que existen las redes sociales. La información ya no es estanca.
En cambio, cuando pillaron a aquellos dos policias diciendo que “al osito verás cómo lo van a poner” en alusión a Junqueras tras su declaración en el Supremo -y cuando ya iba en furgón policial hacia Estremera- estuvieron dos días machacándonos a través de TV3 y el 324.
Parece que eso sí tenía interés informativo y lo de Salvadó, no. Como se nota que David Bassa, expresidente del grupo soberanista de periodistas Ramon Barnils, es el jefe de informativos de la cadena. También es de los nuestros. Aunque luego sale dando lecciones.
Sin olvidar la conversación entre el entonces ministro del Interior, Jorge Fernández, y el director de la Oficina Antifrau, Daniel de Alfonso, que dio origen a la llamada Operación Catalunya. Estuvimos tragando la susodicha operación durante semanas.
Hasta hicieron una comisión de investigación en el Parlament. Y Mediapro se apresuró a hacer uno de los dos reportajes al servicio al procés: el de Las cloacas de Interior.
Ni que decir que obviaron el detalle de que a Daniel de Alfonso … ¡lo pusieron ellos!. Lo propuso Mas para el cargo. En el 2011 salió elegido con los votos de CiU, PSC, PPC y Ciudadanos. Sólo los tres diputados de Solidaritat votaron en contra. ERC e ICV al menos se abstuvieron. No tengo constancia de que la Oficina Antifraude haya desvelado nunca un caso de corrupción que afecte a la antigua Convergencia. Al menos de los gordos.
Desde luego a mí me pareció un verdadero escándolo las opiniones de uno y de otro. Y la prueba es que ni el ministro ni el juez permanecen en el cargo ¿Pero si lo de Salvadó es una conversación privada la del ministro y el director de Antifraude también, no?
Lo increíble en este caso, dicho sea de paso, es que se grabara a un ministro en su propio despacho con total impunidad. Y todavía no se ha hallado al culpable. El día que graben a un consejero o a un presidente de la Generalitat en Palau o en el coche oficial diremos que es una vulneración de la intimidad y un ataque a Catalunya.
En fin, lo peor de todo es el nivel de pardillismo que demuestran. En primer lugar porque resulta que para llegar a consejera lo más importante es la dimensión de las tetas en vez de la capacidad profesional. Todavía recuerdo a Mas vendiendo aquello del govern dels millors. Duró poco el invento.
Y, en segundo lugar, porqué Salvadó es al que ya pillaron diciendo, ante el registro de su despacho por la Guardia Civil, que había que tirar todos los papeles por la ventana. Mientras que Lluís Jové era como Nixon: lo apuntaba todo en la famosa agenda Moleskine. Le perdió, sin duda, su voluntad de pasar a la posteridad.
En uno y otro caso no hecho falta ningún agente del CNI para cargarse un poco más el proceso. La Guardia Civil sólo ha tenido que tirar del hilo. ¿Con este personal querían hacer una República?
*Director de e-noticies