El peor tirano de América. Castro y Franco
Impresiona repasar el prestigio que ha rodeado a Fidel Castro en sus inicios, durante largos años y todavía hoy en círculos influyentes políticos e intelectuales, a pesar del balance brutal de su obra: más de un millón y medio de cubanos exiliados, cerca del 20% de la población, un caso único en la historia; y muchos más que habrían huido de no ser Cuba una isla, sometida además a intensa vigilancia policial. Solo este dato debería ser suficiente, como el muro de Berlín, para entender qué significa el régimen instalado por Castro y más en general el comunismo. Antes, Cuba era uno de los países más prósperos de Hispanoamérica, naturalmente con sus bolsas de pobreza y de analfabetismo, bolsas de menor importancia y en reducción, pero de las que ha sacado la propaganda totalitaria un partido inagotable para justificarse.
El resultado es que sobre los lectores se ha instalado una censura férrea y que la población vive sometida a un racionamiento precario; gran parte de ella no podría sobrevivir sin las remesas que los exiliados envían a sus familiares en la isla. Se ha implantado una economía primitiva, cuartelaría, o más bien penitenciaria, y solo hay que ver los documentales sobre las casas en la miseria, semiderruidas, echada a perder la bellísima Habana española, etc. Ello es tanto más ultrajante cuanto que el régimen llegó prometiendo tasas de desarrollo muy superiores a las de los países capitalistas, cosa “lógica” porque iba a ponerse a punto una economía “científica” que superaría la “anarquía burguesa a favor de unos pocos”. El fracaso de las campañas económicas fue hasta grotesco, y mientras existió la Unión Soviética, el castrismo vivió en parte de chulear a sus protectores del Kremlin, que aceptaban subvencionar el desastre a cambio de la baza estratégica y propagandística que suponía. Pero cuando Allende pretendió crear una segunda Cuba en Chile, los soviéticos se echaron las manos a la cabeza: aquello solo podía ser una enorme ruina.
La propaganda castrista afirma que la miseria traída por el régimen a la isla se debe al embargo de Usa, causado por el robo que había hecho Fidel Castro de las propiedades useñas en la isla. El argumento no puede ser más absurdo, por cuanto otro tópico inmensamente esgrimido por los comunistas cubanos y la izquierda de todo el mundo, insistía en que el comercio con los países capitalistas era “desigual” y por tanto empobrecía al “Tercer Mundo”. Pues bien, Castro había “liberado” a Cuba de tal desigualdad, por lo que el país debía enriquecerse, máxime con su economía planificada y “científica”. Por lo demás, la argucia falla por otra vía: Cuba comerciaba con otros países, entre ellos la España de Franco, que le vendió camiones, autobuses, pesqueros modernos, etc. El problema para el castrismo era y es que apenas puede pagar. Caída la URSS, y tras años muy difíciles (para el pueblo) la parasitaria economía cubana pudo matenerse gracias a la Venezuela de Chávez, aprovechando el alza de los precios del petróleo. Chávez y su sucesor están consiguiendo reducir a la riquísima Venezuela a una situación parecida a la cubana.
La tiranía castrista ha podido mantenerse mediante una represión sin paralelo en Améica: asesinato de opositores, mayor proporcionalmente que el de cualquier otra dictadura del continente, palizas, encarcelamientos arbitrarios, y sobre todo instalando un inmenso aparato policíaco de control, manzana por manzana de casas, de tal manera que todo el mundo desconfíe de todo el mundo. Un sistema que ya construyeron la Unión Soviética y la Alemania nazi.
En España tenemos partidos como la ETA, Podemos, gran parte del PSOE y otros, que siguen admirando y deseando imitar la labor de Fidel Castro. Aquí debemos eliminar un equívoco, el de creer que lo admiran porque desconocen los hechos: los conocen perfectamente, y defienden a Castro precisamente por ellos. Están dispuestos a asesinar en masa, expulsar o hacer huir a los desafectos e implantar una economía carcelaria, no debe cabe la menor duda de ello. ¿De dónde viene entonces el prestigio, afortunadamente en descenso, de que ha gozado el castrismo en medio mundo? Creo que principalmente de dos cosas: la fascinación del ideal igualitario y su desafío permanente al poder de Usa. Millones de personas parecen dispuestas a aceptar la pobreza siempre que sea igualitaria. Lo cual, por cierto, tampoco funciona en los regímenes comunistas, donde la miseria se distribuye más o menos por igual entre la masa, mientras la oligarquía del partido disfruta de grandes privilegios, incluyendo tiendas, restaurantes, etc., a las que está vedado el acceso al “pueblo”. Son de hecho los amos del país en un grado al que no se llega en los países capitalistas. Ello debiera dar qué pensar a quienes hacen de la igualdad el valor supremo.
El desafío del pequeño David cubano al enorme Goliat useño tiene otra dimensión, aunque nuevamente equívoca. Pues es cierto que Usa ha intervenido una y otra vez en los asuntos internos de numerosos países hispanoamericanos, les ha aplicado la diplomacia de las cañoneras, los ha invadido o fomentado golpes de estado para imponer regímenes que beneficiase los intereses económicos de las grandes compañías useñas, etc. Todo lo cual ha supuesto una humillación permanente para esos países y fuente de muchas corrupciones –que solían sumarse a las que de antiguo lastraban a esos países). Probablemente esa línea de independencia y desafío de Castro a Usa fue la razón por la que Franco aceptó comerciar con un régimen comunista que también había robado numerosas propiedades de españoles en la isla. Sin embargo, si el precio de ese desafío iba a ser un despotismo brutal e improductivo como la de Castro, el remedio sería peor que la enfermedad. Evidentemente habría que buscar otra vía.
Y hablando de Franco, son muchos los necios de derecha que, con infundadas pretensiones democráticas, lo equiparan con Castro porque ambos fueron “dictadores”. Así que habrá que recordar algunas diferencias: Castro ha destruido toda oposición democrática, Franco no tuvo oposición democrática real, ni en la guerra, pues el Frente Popular era cualquier cosa menos democrático, ni después, salvo intriguillas menores: no había demócratas en sus cárceles. Castro arruinó a un país considerablemente próspero, Franco recogió un país en la ruina y lo dejó como uno de los más prósperos del mundo. Del primer exilio español, infinitamente menor que el cubano, casi tres cuartas partes volvieron a España en el mismo año en que terminó la guerra. La represión de posguerra en España se realizó mediante juicios, no de la forma arbitraria o por simple asesinato como se hizo en Cuba (y en Francia, Italia, Alemania, etc. al acabar la guerra mundial). En España no hubo nada parecido, ni de lejos, al régimen policíaco de Castro, ni una censura semejante. Y así podríamos seguir.
Es que hay dictaduras y dictaduras. La de Castro fue innecesaria, la de Franco la hicieron necesaria unas convulsiones y unos partidos totalitarios que estaban arruinando y ensangrentando el país ya antes del 18 de julio del 36. Y de su inmensa obra fue posible que saliera una democracia estable y no convulsa. Que está enferma y se está pudriendo a causa, precisamente, de un antifranquismo que resume lo que Marañón achacaba al Frente Popular: estupidez y canallería.
interesante articulo y muy “elegante” forma de suavizar la dictadura de Franco. Fidel con sus errores post revolución arrastro a su pueblo a una debacle económica, política y social, que dictadura no hace eso. El nunca se doblego, su insurrección fue contra otra dictadura y sin apoyos. Pinochet establecio una dictadura golpeando una democracia y con el apoyo de USA. De derechas o izquierdas las dictaduras generan detractores y seguidores, unos matan mas, otros menos, el cuento de la democracia solo sirve a los politicos para seguir viviendo. Este país sería mas grande y prospero si se educara mejor, haciendo… Leer más »
Como siempre…D. Pío…¡¡¡Simplemente…Genial!!!.
Exelente D. PIO , como siempre .Recuerdo las ruinosa relaciones comerciales con cuba en la época de Franco.Como no podían pagarnos, nos lo devolvieron en bidés e inodoros., Yo era pequeño, y a lo mejor la memoria me falla, pero creo recordar el cachondeo nacional que hubo con aquello.Yo recomendaría a todos estos adoradores de Castro , que se leyeran “Archipiélago Gulag”o “Embajador en el infierno”. gracias por su lúcido artículo
Magnifico, articulo, de Don Pio. Toda la Verdad, y la razón. Toda la verdad, que ocultan los medios, de desinformación, de la T.V. y otros, sobre Castro, y sobre Franco. Con todo esto se ve una prueba, más de que hay una conspiración, de la judío – masonería, para poner de bueno a Castro, por haber perseguido a los católicos, y la Iglesia, y tratan de compararlo, con Franco, cuando, Franco, defendió, a los católicos, y a su Iglesia, y dejó en 1975, un país prospero, y caminando, hacia la modernidad, mientras Castro, arruinó su país. ( ¿ Quizás ese… Leer más »
Totalmente de acuerdo, Don Pío
Coño por razón la derecha neoliberal del PP, los anaranjados de CIUDADANOS e incluso la CASA REAL ESPAÑOLA le comen el culo al régimen cubano todavía en pie tras la muerte de un engaña bobos barbudo y tercermundista de FIDEL CASTRO … más de 250 empresas españolas en la isla tienen la culpa … es decir si estas empresas quieren funcionar sin problemas las putas y cochinas autoridades españolas, deben rendir pleitesía a semejante régimen putrefacto comunista bananero … el mismo REY JUAN CARLOS el papi de FELIPE SEXTO ira al funeral del tirano rojo de CASTRO, toda una chupada… Leer más »
Aplica lo mismo a Marruecos.
MARRUECOS, ARABIA SAUDITA y un buen puñado más de países con regímenes y dictadores …
Grande Don Pío, como siempre