Trump adelanta a Clinton tras el escándalo de sus ‘amnesias’ con el FBI
Carlos Esteban.- La campaña de Hillary se encuentra ahora en un callejón sin salida. Dos de la larga lista de problemas de su candidatura son las dudas sobre su estado de salud y la negligencia criminal de la que hizo gala al usar cuentas de correo no seguras para comunicaciones oficiales siendo secretaria de Estado.
Apenas una semana después de que los grandes medios calificaran de ridícula ‘conspiranoia’ las sospechas de que Hillary Clinton se resiente de ocultos problemas de salud, documentos recién publicados revelan que la candidata declaró ante el FBI que no podía recordar las instrucciones recibidas sobre material sensible mientras era secretaria de Estado tras un golpe en la cabeza sufrido en 2012.
Si se tratara de otro candidato -o, mejor, si enfrente tuviera un candidato distinto a Trump-, la campaña de Hillary Clinton estaría ya muerta y enterrada y los medios abrirían unánimes con el epitafio de su carrera política.
Los documentos, que detallan la investigación ya cerrada del FBI sobre el uso de un servidor privado de correo electrónico durante su mandato al frente de la secretaria de Estado, Clinton confesó en una entrevista el 2 de julio que “no recibió instrucciones o guía con respecto a la conservación de archivos” tras abandonar el cargo a principios de 2013.
Especifica el informe: “Sin embargo, en diciembre de 2012 Clinton sufrió una concusión y en torno a fin de año tuvo un coágulo. Por consejo médico, solo podía trabajar en su puesto unas pocas horas diarias y no podía recordar todas las instrucciones recibidas”.
¿Qué no recordaba Hillary Clinton, según sus propias declaraciones?
Clinton no podía recordar un proceso específico para designar un objetivo para el ataque con drones
Clinton no podía recordar usar un móvil especial durante su mandato como secretaria de Estado
Clinton no podía recordar cómo se destruyeron los datos en su Blackberry
Clinton no podía recordar por qué la Secretaría de Estado no podía proporcionarle una Blackberry segura
Clinton no podía recordar recibir correo alguno que pensara que no debería estar en un sistema de correo no seguro
Clinton no podía recordar sus conversaciones sobre la creación del dominio clintonemail.com
Clinton no podía recordar recibir instrucciones del departamento sobre políticas de correo electrónico esbozadas en el Manual de Asuntos Extranjeros
Clinton no podía recordar ninguna rutina para borrar correos en su cuenta mientras fue secretaria de Estado
Clinton no podía recordar una nota concreta enviada a todo el personal sobre seguridad de la cuenta de correo personal
Clinton no podía recordar haberse reunido nunca con Bryan Pagliano para discutir apoyo técnico sobre su cuenta de correo
Clinton no podía recordar concretamente quién tenía acceso a su Blackberry y sus cuentas de correo
Clinton no podía recordar no podía recordar a ninguna otra persona con cuenta de correo en el dominio clintonemail.com fuera de su ‘factotum’ Huma Abedin
Clinton no podía recordar haber usado una tableta iPad mini hasta después de su dimisión como secretaria de Estado
Clinton no podía recordar que su director de Planificación Jacob Sullivan su cuenta de Gmail para asuntos oficiales
Clinton no podía recordar que se le hiciera una petición oficial para revelar el contenido de correos en atención a la Ley de Revelación de Secretos Oficiales fechada el 11 de diciembre de 2012
Clinton no podía recordar quién recomendó que cambiara de cuenta de correo cuando se hizo pública en marzo de 2013.
Entre otras amnesias selectivas.
La campaña de Hillary se encuentra ahora en un callejón sin salida. Dos de la larga lista de problemas de su candidatura son las dudas sobre su estado de salud y la negligencia criminal de la que hizo gala al usar cuentas de correo no seguras para comunicaciones oficiales siendo secretaria de Estado. Con la revelación de los documentos del FBI, ahora debe elegir entre confirmar que las consecuencias de la concusión y el coágulo cerebral son graves y merecen un escrutinio o reconocer que mintió al FBI.
Clinton sufrió una caída en 2012 que le produjo una concusión tras la que declaró experimentar visión doble y mareos, pero ha mantenido hasta ahora que el accidente no ha dejado secuela alguna, pero los documentos publicados por el FBI estas semanas parecen apuntar a lo contrario.
La situación es electoralmente catastrófica, si bien habrá que esperar para ver cómo se refleja en las próximas encuestas, y las últimas muestran ya una ligerísima ventaja del candidato republicano, informa Reuters.
La encuesta Reuters/Ipsos publicada el pasado viernes revela que Trump ha cubierto la distancia que le separaba de su rival demócrata al consolidar el apoyo entre los votantes probables de su partido en las ultimas semanas.
La encuesta muestra un 40% de los votantes probables decantándose por Trump, frente a un 39% que lo hace por Hillary, un descenso en apenas una semana de nueve puntos. El respaldo de Trump entre los republicanos ha subido un 6% en las dos últimas semanas, a casi un 78%, aún lejos del que disfrutaba el candidato Mitt Romney entre los suyos en el verano de 2012, del 85%.
La bollera mística
La bollera mística
Ahí estamos! Con un pequeño as de última hora que guarde en la manga Trump, que pueda darle otro toque en los morros a la clintona, y con un poco de suerte que nunca está de más, tendremos nuevos aires en la casa Blanca. No voy a poner la mano en el fuego por Trump ni por nadie. Pero antes que a la arpía de la Clinton me quedo con cualquier cosa. Hasta con el Bobama, que ya es decir.
Ahora a rezar y cruzar los dedos para que no nos salga rana.
Ojalá gane trump, hillary retirate vieja bruja!