Un padre se lanza en plancha al cuello del asesino de su hija durante un juicio en EE.UU.
El padre de una joven de 18 años asesinada por un criminal en serie no pudo reprimir su rabia minutos después de que el tribunal dictase la pena de muerte. Ha ocurrido en Cleveland, Estados Unidos.
Van Terry, padre de la víctima Shirellda Terry, se subió al estrado para hablar sobre la pérdida de su hija a manos del asesino en serie Michael Madison.
«Se supone que tenemos que perdonar de corazón a este payaso que ha matada a mi hija», dijo en el estrado. En ese momento, miró para atrás y vio como Madison sonreía de forma provocadora. Entonces se levantó de la silla, caminó unos pasos y se tiró en plancha, directo al cuello, del criminal que le había arrebatado a su hija.
El crimen de Shirellda Terry, de tan solo 18 años, tuvo lugar en julio del 2013. Su cuerpo y los de otras tres mujeres, de 38 y 28 años, aparecieron cerca del apartamento del asesino en serie. Madison reconoció a la policía que había estrangulado a las dos últimas mujeres pero dijo no recordar si había matado a Shirellda.
Michael Madison ha sido condenado a pena de muerte.
Gracias a la pena de muerte, nos libran de algunos, de esos monstruos, para que ya no asesinen más en su vida. Aún así se sonrió, burlándose, bueno, ya veremos, cuando lo vayan a ejecutar, si vuelve a sonreír, y cuando llegue al infierno, le sonreirá el diablo.
En EEUU muchos, ya no asesinos sino ladrones de caballos ingresaban voluntariamente en la carcel del pueblo para que no lo lincharan, a veces no obstante entraban y acababan colgados.
Al menos allí tienen pena de muerte
Menos mal que están en los EEUU. Aquí le hubieran dado una habitación en el hotel rejas durante unos siete años, bien protegido de los otros reclusos, y luego a la calle con una identidad nueva, vivienda del estado y subsidio de desempleo.
El único defecto que veo en la aplicación del justo castigo para ese hijo de puta es que no hayan dejado que el padre termine el trabajo.