El fracaso está en la política
TLG.- Los gritos de ¡tongo, tongo! en la Puerta de Alcalá de la noche del sábado desde luego eran un mal retablo del espíritu olímpico, pero así es como se metaboliza la decepción a la española: inventando una teoría de la conspiración con enemigos exteriores a los que cargar el fracaso. Ni un minuto para pensar qué hacemos mal. Todos los argumentos, desde las maniobras de las metrópolis europeas para allanarse 2024 hasta el soborno para tapar Fukushima, eluden asumir errores. Pero perder a la primera en el descarte delata una inquietante falta de potencia. Contra la opción del tongo tongo que ayer la prensa hooligan llevaba a portada, o los discursos patrioteros hasta llamar ‘bastardos’ a quienes discrepaban ahora de los JJOO, la realidad es que España va mal.
Más allá de la retórica propagandística de Marca España, otro chiringuito tan lucrativo como las oficinas olímpicas donde nadie exige responsabilidades, esto ha sido un examen real y se ha suspendido. Toda una lección para quienes airean gigantes quijotescos sin ver los molinos de la realidad. Es el drama de ‘el espejo de boutique’: nos vemos como nos queremos ver, pero después nos ven como somos. Contra el optimismo monclovita, el mundo ve un país endeudado, despilfarrador sin control del déficit, machacado por el paro; y además herido por Free Catalonia y otras fronteras. España es un país de baja credibilidad. Y para fracasar olímpicamente además computa la ética del dopaje; brillante en Japón mientras la Operación Puerto está en la mente del mundo con un proceso judicial de opereta y un Gobierno que llevaba en sus listas a Marta Domínguez como fichaje estelar. La Marca España no vende; y el problema no está en quienes no la compran, sino aquí.
En la última década algo se ha roto más que la burbuja, y el escenario ha sido la política. Se podrá debatir si el punto de partida fue el Prestige, con la deslealtad de la oposición de izquierda que después repetiría el equipo de Rajoy a machamartillo, o la victoria del aznarismo en 2000 desatando una polarización envenenada en torno a España llevado al paroxismo con el Pacto del Tinell zapaterista… pero en definitiva esta década ha sido un desastre que ha deshecho las costuras de la nación. Se ha demonizado al ‘otro’, y nada une al país entre las trincheras de la confrontación. Rajoy culpó a Zapatero de la derrota de Madrid 2012, así que ahora le toca a él cargar Madrid 2020. Así va esto. La fuerza país es clave -Río y Londres ganaron a Madrid con peor calificación- y aquí naufraga. Eso no se arregla con clases de inglés. Antes que un buen proyecto de Juegos, se necesita otra vez un buen proyecto nacional. Y no hay mimbres para creer en esta generación política, pero al menos queda la esperanza de esa parte de la ciudadanía que se resiste, cada vez más, a la lógica perversa de conmigo o contra mí.
El accidente de Santiago estaba muy reciente, de lo poco que presumía España era de la alta velocidad y a de mostrado una inseguridad total en este campo.
España ha dejado de ser un pais , todo el mundo robando desde el monarca hasta el ultimo consejal del ultimo pueblo , la canalla marxista asaltando supermercados y sin pasar nada ¿ esto es un pais serio ? aqui hay seguridad para las empresas, pues no , que esperaban estos politicos mediocres y corruptos .
Fuerza país no puede haber cuando esta mierdocracia lleva 35 años tirando por tierra la autoestima de los españoles por medio de la ruina que nos han traído. Se descojonan de nosotros los sátrapas de Gibraltar, de Marruecos, de Argentina, de Bolivia, de Venezuela, hasta los piratas de Somalia; nuestros ” aliados ” de Francia, Reino Unido, Alemania. Luego se ha permitido que una banda de asesinos de casi 1000 españoles se metan en las instituciones y trinquen de los impuestos de todos; que unos caciques regionales le echen y ganen un pulso al Estado .Y la casta política no… Leer más »
Pais de la basura