Una catequesis multiculti que costó a los británicos 33 millones de euros
TD.- Con escepticismo y una prudente distancia leemos las reseñas sobre la ceremonia inaugural de las Olimpiadas de Londres. Insistir en su espectacularidad es repicar lo obvio, describirla como “so british que fue una declaración de amor al país, su cultura y su legado” es una media verdad. Mucho más acertado sería presentarla como una catequesis multiculti, porque la composición racial de las masas actuantes tenía que ver bastante poco con la cultura y legado británicos. ¿Serán realmente representativas de la Londres actual? Decimos Londres porque los JJ. OO. los organiza no tanto un país, cuanto una ciudad.
En todo caso, es de dudar que ese batiburrillo racial pueda continuar esa cultura y ese legado celebrados. Los británicos deberían reflexionar al respecto. No es que nos preocupe la trasmisión de esa cultura pop celebrada ayer bajo la mirada de la cabeza de la Iglesia Anglicana en la que no apreciamos traza alguna del Reino de Cristo. Nos preguntamos sin embargo si hará reflexionar, y en qué dirección, a los paganos de esa catequesis multiculti que costó a los británicos 33 millones de euros. Seguiremos el tema.
La inauguración estuvo precedida por la exigencia de un minuto de silencio en recuerdo de las once víctimas israelíes de los atentados de los Juegos Olímpicos de Múnich. En septiembre de 1972, hace cuarenta años, el equipo olímpico de Israel fue atacado por un comando de terroristas palestinos que asesinó a sangre fría a once deportistas y entrenadores. Los deudos de las víctimas exigen ahora al mundo un minuto de silencio para conmemorar a sus difuntos.
“Mi marido fue asesinado en territorio olímpico, y merece el mismo homenaje que todos los demás participantes,” dijo Ilana Romana, cuyo esposo, Josef Romana, competía en halterofilia. “Hasta ahora, no hemos logrado derrumbar el muro, pero ésta es nuestra oportunidad,” añadió la mujer de 67 años de edad. Ankie Spitzer, viuda del esgrimista Andre Spitzer, critica la postura del COI: “Esto es discriminación. Somos del país equivocado y practicamos la religión equivocada”.
Las exigencias del victimismo judío encontraron eco en los parlamentos alemán, canadiense y, por supuesto, israelí. La Secretaria de Estado (ministra de exteriores) de EE.UU., Hilaria Clinton, pidió oficialmente en carta dirigida al Presidente del COI que se hiciera una “ceremonia de conmemoración adecuada”. Cuatro miles de millones de espectadores en silencio por once víctimas de un atentado sucedido hace 40 años parece una desmesura. Esta semana, el presidente del Comité Olímpico Internacional, Jacques Rogge, rindió homenaje a los 11 atletas israelíes que murieron 40 años atrás en Munich pero rechazó la petición de Israel de hacer ajustes a la ceremonia de inauguración de los JJOO en Londres repetir el homenaje. Lo seguirán intentado.
Una curiosidad. Esta crítica, bastante acerba, de la inauguración, a la que califica de bastante ridícula, y no sin razón, suscita un cometario (#132) que dice que “Aquí habrían montado un chou multiculti en el que los españoles saldríamos arrastrándonos por el barro y dándonos latigazos pidiendo perdón por haber nacido”.
Pues yo por lo leido por ahi creo que fue un rito iluminati y mason … muchas piramides (triangulos), mucho currito para unos cuantos srs con sombrero de copa poniendo las manos en ciertas posiciones (la elite y sus mensajes), y la forma del campo : un ojo … lo que no acabo de entender es lo de los niños, no se a que vienen , aunque se comentan cosas bastante raras … y mas sobre el muñeco bebé gigante. Nada, ganas de pensar y mal que tiene uno ….