Ramón Tamanes sentencia que “la independencia de Gibraltar nunca será posible”.
Hablar de la persona de Tamames sin caer en las generalidades o injusticias no resulta nada fácil, igual se cuentan el número de admiradores que detractores pero lo cierto es que no deja indiferente, como quiera el sentido de la economía europea debe mucho a Tamames, también los desaciertos de la economía española deben mucho a obviar sus tesis.
Profesor de Estructura Económica de la Universidad de Málaga hasta 1971 y posteriormente profesor de la Complutense, Tamames fue durante mucho tiempo el economista con mayúsculas e ideólogo que adoptó el Partido Comunista para su proyecto social, admirado por el desaparecido y no menos famoso profesor Tierno Galvan sin quererlo y olvidado en la actualidad asoció su futuro al de la suerte de esa formación política, en la red podemos encontrar biografías mucho más exactas del maestro. El Diario La Razón publica hoy este interesante artículo de Tamames:
“Cualquiera que se ocupe o preocupe de cuestiones económicas sabe perfectamente que el escocés Adam Smith (1725-1790) es considerado de manera casi unánime como el padre de la Economía moderna, y fundador de su Escuela Clásica. Ocupó durante años la cátedra de Filosofía de la Universidad de Edimburgo, y en esa primera fase de su vida académica alcanzó gran predicamento como autor del libro «Teoría de los sentimientos morales» (1759), en el que estableció su propia escala de valores.
Amigo personal del «astuto Hume» –así le calificaba Inmanuel Kant–, de quien surgieron sus primeras inquietudes económicas, Smith aceptó, en 1764, ser preceptor del joven duque de Buccleugh, y fue durante un viaje de estudios a Francia con su pupilo cuando concibió «La Riqueza de las Naciones», que publicaría en 1776. Obra en la que realizó un gran ataque contra el mercantilismo imperante en su época, preconizando la alternativa de la economía liberal: división del trabajo, libertad de contratación, librecambio, y prevalencia de la «mano invisible» como guía suprema del orden económico, ubicado en la propia naturaleza de las cosas.
Todo lo anterior viene a colación por los nuevos roces hispano-británicos, a propósito de la cuestión de Gibraltar, que constituye, desde el Tratado de Utrecht de 1714, un grave inconveniente para las relaciones entre dos grandes países europeos. Tema que personalmente tuve ocasión de tratar hace años, junto con el economista británico Maxwell Stamp, con quien escribí el libro «Gibraltar, británico o español», publicado por Ariel en 1976; auspiciado por la Fundación Juan March y promovido por Manuel Fraga Iribarne cuando era embajador de España en Londres.
Pero lo principal de este artículo, consiste en rescatar lo que en su momento preconizó Adam Smith sobre las relaciones entre las monarquías británica y española a propósito de Gibraltar. Más concretamente, de «La Riqueza de las Naciones» (págs. 121 y 122 del volumen 2 de la primera edición, y 739 y 740 de la versión de Liberty Classics, Londres, 1976), extraemos la principal referencia al problema, que dice textualmente:
«La protección del comercio mediterráneo [del Reino Unido] fue el propósito original de las guarniciones [británicas] en Gibraltar y Menorca… administradas por el Poder Ejecutivo, cuyo dominio consiste, en gran medida, en una demostración del orgullo y la dignidad de dicho poder… Esas guarniciones, consiguientemente, no han sido nunca objeto de negligencia, aunque Menorca… está perdida, seguramente, para siempre… Sin embargo, nunca debería entenderse en mis palabras la insinuación de que esas costosas guarniciones sean necesarias, incluso en el más pequeño grado, para el propósito con que originariamente se desmembraron de la Monarquía española. Un desmembramiento que nunca sirvió para otra cosa que alienar [a la monarquía británica] de su aliado natural, el Rey de España; y para unir las dos ramas principales de la casa de Borbón en una alianza permanente y más estrecha de lo que los lazos de sangre podrían haber representado» (los corchetes son nuestros).
Las anteriores frases resultan bien expresivas de la inclinación de Smith a retornar Gibraltar a los españoles. Para así acabar con un contencioso muy contrario a los intereses británicos de amistad duradera con España.
Pero no satisfecho con las observaciones antes expresadas, Smith volvió a referirse al tema en una carta dirigida de John Sinclair, datada el 14 de octubre de 1782, subrayando: «Es a nuestra posesión del desolado Peñón de Gibraltar a lo que debemos la unión de Francia y España, contraria a los intereses naturales de ambos países… causante de la importante enemistad de los españoles [hacia Inglaterra] y de la fútil y costosa amistad [del Reino Unido] con Portugal».
Creo que es bueno destacar en la hora presente los dos textos del mayor del más renombrado de los economistas, pues aunque sea en un contexto geopolítico diferente (ahora los Estados mencionados convivimos en un sistema de seguridad común y de amistad dentro de la Unión Europea), sus argumentos siguen siendo válidos; para encontrar la solución definitiva a un problema que dura casi ya tres siglos. Con implicaciones como las de los pesqueros de la Línea de la Concepción y del resto de la Bahía de Algeciras, acosados por la policía gibraltareña.
También las recomendaciones smithianas podrían ser útiles para que los llanitos se decidan a aceptar que frente a sus mayores o menores egoísmos de demandar una autodeterminación impracticable (replicando a la autoridad británica hay que decir: «La independencia de Gibraltar jamás será posible»), debe predominar la renovada amistad de 47 millones de españoles y de 68 millones de británicos. Sin olvidar a los 30.000 gibraltareños, cuya gradual incorporación a la nación española les reportará, sin duda, una situación mucho mejor que cualquier otra imaginable. Se haría a través de la configuración de una nueva comunidad autónoma (con el inglés como lengua cooficial con el español, que prácticamente hablan todos los gibraltareños) y con plenitud de derechos dentro de un gran país. Entonces, Gibraltar sí sería una plaza financiera más que relevante, en vez de paraíso fiscal vergonzante. Y uno de los puertos principales del Mediterráneo, en vez de obsoleta base militar”.
España carece de peso a nivel internacional para hacer valer sus derechos. estas son las consecuencias de una politica desacertada,caracterizada por un buenismo y una renuncia en hacer poner en juego sus bazas.En su momento cuando tenia los mimbres para ser potencia nuclear no los trabajo,y dejo,mejor dicho los politicos de la transicion dejaron pasar la oportunidad que nos hubiera permitido ser un pais fuerte con capacidad de hacerse respetar,. Hoy nos chulean. Cada vez que quiere gibraltar y sobre la base de los hechos consumados se apropia de aguas que no les corresponde sabiendo que ahi está el hermano… Leer más »
ESTOY TOTALMENTE DEACUERDO CON ESTOS CAMARADAS EN QUE GIBRALTAR ES ESPAÑOL PERO LOS GOBIERNOS QUE TENEMOS NO TIENEN COJONES PARA PLANTAR CARA SEA POR LAS BUENAS O POR LAS MALAS Y SI HAY QUE TOMARLO POR LA FUERZA SE TOMA QUE YO TENGO 54 AÑOS Y NO ME IMPORTARIA MORIR EN EL EMPEÑO ASI QUE ESO ES LO QUE HAY POR LAS BUENAS DE MOMENTO SE CIERRA LA VERJA Y POR LAS MALAS SE TOMA CON LAS ARMAS Y OTRO GALLO CANTARIA ASI QUE GIBRALTAR ESPAÑOL Y ¡¡¡ ARRIBA ESPAÑA COJONES!!!
Nos da igual tener gobiernos de izquierdas que de derechas, no tienen cojones de plantarse ante los hijos de la gran bretaña…, el primer paso fundamental sin tener que entrar en enfrentamientos directos es cerrar la verja y los llanitos que se jodan, y ayudar a los españoles que trabajan en la roca. Lo demás son paños calientes.
SI GIBRALTAR EXISTE ES POR CULPA DE LOS MEQUETREFES QUE HAN GOBERNADO DESDE 1975 EN ADELANTE. FRANCO CERRO LA VERJA A PIEDRA Y LODO Y EN MANSUETO DE F.G. – MISTER X – LO ABRIÓ.
CIERRENLA DE NUEVO Y CORTEN TODAS LAS COMUNICACIONES, VEREMOS LO QUE TARDAN LOS BRUTANICOS EN TIRAR LA TOALLA Y MANDAR AL CUERNO A LOS “LLANITOS” (ANDALUCES RENEGADOS)
NOTA: PARA HACER ESO, HAY QUE TENER LOS COHOMBROS MUY BIEN PUESTOS….
Yo a los 30.000 gibraltareños que odian a España los enviaría a Madagascar. Gibraltar es español, pero a esa gentuza no la quiero en mi país.
Gibraltar es una colonia, hecho reconocido por la ONU. Si el comité de descolonización de la ONU ha instado historicamente a todas las metrópolis a ceder sus colonias a sus legítimos dueños por qué motivo iba España a renunciar a un territorio que es tan español como Soria. Más aún, Gibraltar es un continuo desafío a la soberanía de España, primero fue la propia Roca, más tarde el Istmo, luego el espacio aéreo y las aguas de la bocana de su puerto (construido sobre aguas españolas) y finalmente la usurpación de todas las aguas que rodean al Peñon (un triángulo… Leer más »
Gibraltar ES ESPAÑOL, siempre lo ha sido, sus habitantes fueron expulsados y obligados a fundar un nuevo municipio (San Roque); más aún, a finales del XIX con motivo de una epidemía el buenismo de España dejó que los británicos montasen tiendas de campañas donde atender a su población ya que no había espacio suficiente, el resultado es que esa ayuda temporal la usurparon y se quedaron para siempre con el Istmo, durante nuestra Guerra Civil aprovecharon para robarle a España algunos metros más de territorio; en la actualidad nos han robado el espacio aéreo sobre el Peñón y unas aguas… Leer más »
Las circunstancias políticas y económicas de aquel momento ligadas a las actuales, no permiten ni de largo que, el tema de Gibraltar pase de ser un mero ejercicio de cabreo y reivindicación por nuestra parte. Si exceptuamos las medidas tomadas por Franco en la linea- no más-, de que sus medidas de cierre de la verja darían los frutos apetecidos y harían caer esa breva gibraltareña, todo lo demás; lo que había, y la casta venida a continuación ha sido un continuo desastre de dejadez, un mirar pasar el tiempo, mucho votar, contar y vuelta a contar votos, trincar y… Leer más »
Es un error vincular con Gibraltar a Ceuta y Melilla que son plazas españolas desde mucho antes de que existiera Marruecos. Son casos y paises distintos, lo cierto es que Gibraltar es un anacronismo y la única colonia que existe en Europa. Ceuta y Melilla no son colonias sino territorios españoles como Canarias independientemente de que no estén en la Peninsula.
Habría que forzarlos a devolver el istmo y las aguas, ya sea mediante la diplomacia o mediante las armas.
Y, por supuesto, el aeropuerto y el puerto deberían ser destruidos, y la verja, cerrada.
Antes con Moravinos y zetapedo y ahora con Rajoya y Sorayita-Margallo, Gibraltar primera potencia mundial dentro de cuatro días.
Esa verja y esos monos y ese carné de identidá. Y ese agua, y esa arena y esas comunicaciones y electricidá. Como mola, como mola, Gibraltar primera potencia mundiá.
A Gibraltar le queda ser del Reino Unido lo que a España poseer Ceuta y Melilla.
Hay una regla no escrita para que una nacion (España) no tenga el pleno control del estrecho. De ahi que ni UK ni USA se planteen ceder Gibraltar a España.
Si España cediera Ceuta, Gibraltar seria de inmediato española.
Para los ingleses es un incordio.
Y los llanitos, mezcla de piratas de diseño y chorizos de “todo a 100”, son totalmente prescindibles.
No hace falta ser catedrático ni ingeniero de caminos y puertos para darse cuenta que Gibraltar nunca será español y que tampoco les interesa una independencia de Inglaterra. Pero lo que si podría hacer España, y que he comentado en muchos medios, es iniciar las gestiones legales correspondientes en los numeros organismos oficiales para que se cumpla escrupulosamente el famoso “Tratado de Utrech” y que nos devuelvan todo el espacio terrestre y marítimo que nos han robado los ingleses desde 1713 a nuestros días. Si esto no se consigue por las buenas, los gobiernos de turno deberían cerrar la verja… Leer más »
No sera posible la independencia pero si el aislamiento, el Tratado de Utrecht no dice que haya que proporcionarles, agua, luz, alimentos, aeropuerto, ni tampoco libre transito. Se corta de raiz con todo, se cierra la verja y que se coman a los monos al horno con patatas.
¿Qué patatas?
Menudo aislamiento. España ha cedido 30.000 lineas telefonicas desde las que se forran con apuestas y juegos on-line.
Se imaginan quien era presidente de España y ministro de industria cuando se les regalaron las lineas?.
Pero, hay que ser tonto del haba, los gibraltareños están muy bien así ,esa es la independencia que desea País Vasco y Cataluña, no están en España pero se como de España y se le roba, ¿dónde viven los gibraltareños? en Sotogrande, que esta milonga la sabemos ya, España, paga, paga y paga, y calla calla y calla y nos joden, cierre de la verja y bloqueo y aislamiento total, ya veríamos como decidian ser más españoles que España, pero faltan redaños en este país de emasculados y demás invertidos, cabestros en el doble sentido de la palabra.