El diputado Nasser al Shaker, miembro del partido salafista Nour, ha defendido la práctica de la ablación del clítoris en Egipto por estimar que forma parte del camino (sunná) marcado por el profeta Mahoma en el Islam, al tiempo que ha asegurado que la exprimera dama Suzanne Mubarak, esposa del expresidente Hosni Mubarak, fue una de las principales impulsoras de la ilegalización de la mutilación genital femenina, aprobada en 2007.

Al Shaker, que ha presentado una proposición de ley para legalizar la práctica, ha asegurado que los notables e intelectuales egipcios han dado su visto bueno a la ablación y han considerado que forma parte de la Sunná. En declaraciones a la cadena de televisión Mehwar, el diputado ha explicado que entre los expertos que apoyan su postura figuran el imam Mohamed Sayed Tantawi, Abdel Halim Mahmoud, el exmiembro de la Academia de Investigación islámica Attiya Saqr y el antiguo mufti Nasr Farid Wasel.

En respuesta a la propuesta del parlamentario salafisa, la representante de la Coalición contra la Mutilación Genital Femenina de El Cairo Randa Fajr ha hecho hincapié en que no existe consenso en la comunidad religiosa e intelectual egipcia para imponer esta práctica y ha incidido en que Sayed Tantawi rechazó la normativa en la década de los 90 porque la consideraba un hábito cultural y no una práctica religiosa.

El tema ha surgido después de que algunas personas acusaran a Libertad y Justicia, el partido político del movimiento islamista Hermanos Musulmanes, de haber desarrollado el pasado mes de abril una campaña médica en la región de Minya para practicar la ablación con niñas.

El partido ha rechazado de plano esas acusaciones. El jefe de su grupo parlamentario, Hussein Ibrahim, afirmó el domingo, en un discurso en la Asamblea del Pueblo (Parlamento), que su formación no ha desarrollado ni patrocinado campaña alguna que promueva la ablación.

La mutilación genital femenina se practica ampliamente en Egipto, Sudán y otros países africanos. La mayoría de los Estados árabes e islámicos la considera un crimen, pero algunas personas creen que fue respaldada por el profeta Mahoma.

El Consejo Superior de Investigación Islámica de la Universidad de al Azhar, la institución suní más importante del mundo, ha condenado esta práctica, la ha calificado de dañina y ha sostenido que no se basa en la ley islámica. El responsable de Asuntos Legales de Al Azhar, Dar al Ifta, ha manifestado su condena de la práctica de la mutilación genital femenina.

La prevalencia de la práctica entre las mujeres de 15 a 49 años, que están casadas o alguna vez lo han estado, es del 91 por ciento, de acuerdo con los datos del Estudio Demográfico y Sanitario de Egipto en 2008.

Los activistas de Derechos Humanos mantienen que esta práctica la lleva a cabo principalmente personal médico, a diferencia de lo que sucede en la mayoría de los países que siguen imponiéndola. Egipto prohibió oficialmente la mutilación genital femenina en 2007.