“El Ejército americano se ha propuesto para el 2030 tener una fuerza armada prácticamente robótica o controlada mayormente por humanos, pero activamente siendo robots” a causa de la gran crisis militar, social y económica de EE UU, reflejada en las estadísticas que muestran una elevadísima tasa de suicidios entre los veteranos de guerra, afirma el director del Movimiento Latino USA, Lorenzo Topete.

Según el activista, EE. UU. se está planteando tratar de lidiar menos “con la psique humana y todas las consecuencias de la guerra y la destrucción entre humanos”.

“En el 2010 hubo más suicidios de soldados que muertes en combate en Medio Oriente. Y hay cifras de estudios todavía no oficiales de que entre un 40% y un 50% de la población americana usa algún tipo de antidepresivo. Estamos ante una situación social clínica bastante complicada, que evidentemente tiene también un gran reflejo en la milicia o en cualquier cuerpo de fuerza en este país”, comenta.

Por cada soldado estadounidense fallecido en Irak o Afganistán unos 25 veteranos se quitan la vida en Estados Unidos.

De media, un soldado estadounidense muere cada día y medio en acción en dichos países, mientras que cada 80 minutos se suicida un veterano.

Se registran más de 6.500 suicidios entre los veteranos cada año, una cantidad mayor que el total de muertes de militares en la guerra de Afganistán y la de Irak juntas desde que se desencadenaron dichos conflictos.