P.D.- En la línea de constante dependencia y acatamiento de la Dirección General de Interior de la Junta andaluza y de la Dirección de la Escuela de Seguridad Pública de Andalucía (ESPA) hacia la alcaldesa socialista de Aznalcázar, Lola Escalona, se va a escribir otro nuevo y escandaloso episodio.

La ESPA se convertirá durante todo el mes de julio en una “guardería”, acogiendo cuatro campamentos de verano de una semana, de 80 niños por turno, atendiendo a la demanda municipal de la localidad donde radica la escuela policial fundamentada en la supuesta promoción de la infancia de esta localidad del Aljarafe sevillano. El campamento lo organiza el consistorio conjuntamente con la empresa Lagier Events y los menores aprenderán lengua inglesa durante su estancia.

Se da la circunstancia de que consultada la web de la referida empresa http://lagierevents.com/ se constata que es una empresa madrileña y no de la comarca del Aljarafe, que organiza actividades de un elevado estanding, como el campamento urbano previsto para esas mismas fechas en el colegio de élite de San Francisco de Paula de Sevilla, y que es libre su inscripción y participación, no estando el campamento restringido a menores del entorno de Aznalcázar. Así pues, se trata de ceder el uso de unas instalaciones públicas de la Junta de Andalucía para el negocio privado del camping vecino a la escuela policial y de la empresa madrileña organizadora de eventos.

Se dan otras dos circunstancias curiosas en todo este affaire. La primera, que el camping que linda con la ESPA está vinculado con el hijo de la anterior alcaldesa socialista de Aznalcázar y la segunda, no menos significativa, consistente en que un alto responsable de la empresa Lagier Events, un joven natural de otro país de la CE, es la pareja sentimental de Carmen Escalona, la al mismo tiempo concejala y sobrina de la alcaldesa de Aznalcázar. Como se ve, son todo curiosidades que quedan en casa de la familia socialista de Aznalcázar.

Parece como si se fuese a grabar la segunda entrega de la película Poli de Guardería, de Arnold Schwarzenegger, ya que con estos niños, algunos de cinco o seis añitos, coincidirán más de una veintena de agentes de la Policía Local de Sevilla capital que acabarán en esas semanas su curso de ascenso o Capacitación para Oficiales.

Convivirán los desayunos con tazones de cereales infantiles con las pistolas del 9 mm. Pb. de los alumnos policías. Algo demencial a todas luces eso de ceder instalaciones de un centro de formación policial para colonias infantiles de verano y donde los acampados pagan hasta 300 euros.

Además de la incongruencia de este destino simultáneo del centro formativo, hay que tener presentes aspectos de seguridad personal de esos menores que se alojarán en un centro no construido con finalidad de uso infantil con riesgo de accidentes, y también además la propia idiosincrasia que una escuela de esa tipología conlleva, pues se estaría situando a niños en las mismas condiciones que a policías profesionales ante posibles vulneraciones de la seguridad interior con ocasión de acciones externas de índole delictiva que pudiera sufrir la ESPA por ser un centro de carácter policial.