Las Cuencas asturianas siempre han sido rojas y dinamiteras. Lo último queda en el recuerdo (afortunadamente), pero sigue siendo un territorio en el que la izquierda tiene una hegemonía demostrada. El voto mayoritario de los electores de los diez concejos del Nalón y del Caudal siempre lo ha recogido la izquierda. Principalmente el PSOE, pero también IU, que gobierna dos ayuntamientos. A mediados de la década de los noventa, las Cuencas se sumaron también a la ola conservadora y el PP llegó a colocarse como la segunda fuerza más votada. Sin embargo, las lucha caínitas entre populares y casquistas del Foro Asturias vaticinan que el dominio electoral de la izquierda sea más sólido después del próximo día 22.

Por tradición política y también industrial, este territorio carbonero siempre ha sido el suelo sobre el que la izquierda se ha hecho fuerte.

Ese sustrato sigue vivo. Por eso el 14% de los votos cosechados por la candidatura de Vicente Álvarez Areces en las autonómicas de 2007 le llegaron desde los valles mineros. Los socialistas recibieron más de 35.000 votos hulleros del total de 252.000 sumados en la región, 7.000 más que el PP. El actual presidente del Principado barrió en nueve concejos. Sólo se le resistió Caso.

Si a esos apoyos a la lista socialista se suman los más de 15.000 de IU (para un total de 51.000), el porcentaje del voto de izquierdas de las Cuencas en el contexto regional se eleva al 17% del total del voto de la lista socialista y de Izquierda Unida.

Los datos son incontestables y revelan que las cuencas siguen siendo bastión, reserva y granero de votos de la izquierda, sobre todo del PSOE. No sólo en los comicios regionales. También en las elecciones generales. En las últimas de 2008, los 10 concejos de los valles mineros sumaron 39.000 votos, casi 11.000 más que la derecha, por los cerca de 18.000 de IU.

Ese sólido voto de la izquierda se refleja también en las municipales. En la actualidad, la izquierda copa los 10 gobiernos locales de las cuencas. Ocho para el PSOE y dos para IU (Lena y Caso). En el resto, los socialistas marcan el ritmo. En Mieres y Langreo, concejos más poblados, el PSOE se ha hecho aún más fuerte en las últimas municipales.

En Langreo, de la mano de la lista encabezada por Esther Díaz, los socialistas sumaron 10.073 votos y ganaron concejales. El holgado triunfo supone un cambio de rumbo después de la hegemonía de IU en las legislaturas del 95 y el 99. En Mieres, los 9.418 votos les dieron a los socialistas un concejal más.

Mención especial merecen San Martín, Mieres, Laviana y Riosa, los cuatro ayuntamientos en los que siempre ha habido alcaldes socialistas desde las primeras elecciones municipales en 1979. Tres largas décadas de poder de la izquierda en esos consistorios. No es de extrañar que los nombres de algunos regidores socialistas se hayan hecho ya un hueco en la historia municipal. Es el caso de Vital Álvarez-Buylla en Mieres o de Maximino González Felgueroso y Aladino Fernández en Langreo. También en esta lista se podría incluir a Graciano Torre, actual consejero de Industria, por la impronta que dejó en el Ayuntamiento de San Martín.

El número de concejales que suma la izquierda (PSOE e IU) en las Cuencas también es abrumador. De un total de 148 ediles, los socialistas suman 65, por 34 de IU, frente a los 47 que tiene el PP.

El peso de la izquierda es tal que, tanto a algunos alcaldes como a diputados regionales se les puede otorgar el papel de barones en partidos como el socialista. E igual ocurre en Izquierda Unida. Ahora falta por saber si la crisis puede resquebrajar el hasta ahora monolítico apoyo a la izquierda en los valles mineros, aunque los dirigentes socialistas confían en repetir los resultados de 2007, ya que el candidato a presidir el Principado, Javier Fernández, mierense, tiene una alta valoración en las Cuencas.

Sin embargo, la izquierda opta por la prudencia. Sabenque un constipado político de la izquierda en el Nalón y el Caudal significaría una pulmonía en Asturias.

Una dolencia que sí tiene la derecha asturiana. En las Cuencas, pero especialmente en Mieres y Langreo, llega rota al 22-M. En la capital del Caudal, el cainismo ha propiciado que sea Ideas, el partido de Juan Morales, el destino de dos de los siete ediles que obtuvo el PP en 2007 y que el resto de populares arropen a la nueva formación. En cambio, en Langreo es Foro por Asturias el partido en el que han encontrado cobijo cinco de los seis ediles que había sacado el PP en las últimas municipales.

El tsunami político por la entrada en escena del díscolo Francisco Álvarez-Cascos en la vida política regional tiene efectos visibles en las Cuencas. Efectos de división que no se recuerdan ni siquiera tras el encontronazo de Cascos con el Gobierno de Sergio Marqués en los años noventa.

Por lo demás, el grado de compromiso político en las Cuencas se traduce en una participación electoral por encima de la media regional, aunque la abstención está ganando terreno. En las últimas municiales votaron más de 86.000 personas en las Cuencas. Más en Caudal, un 62%, que en Nalón, un 59%. Langreo fue el concejo con una mayor abstención (45%) y Sobrescobio el más participativo, con un 82%.