La crisis no respeta ni a vivos ni a muertos: Detenido en Elche por abrir la tumba de su hermano para robar joyas
El encargado del cementerio de El Altet señala la tumba.
La Policía Nacional de Elche ya ha encontrado al presunto autor de la profanación en El Altet de la tumba de un joven que murió hace 10 años en un accidente de tráfico. El culpable estaba en su círculo más íntimo: su propio hermano. Según fuentes próximas al caso, los agentes lo arrestaron el martes por la tarde en Alicante por un delito de robo con fuerza y otro contra el respeto a los difuntos. La Policía ha podido recuperar algunas de las joyas más valiosas: un cordón de oro y un colgante.
Al parecer, el ahora detenido tuvo mucho cuidado para sacar el cuerpo sin romper la losa del nicho. Supuestamente desatornilló la lápida de mármol, extrajo el cadáver, que estaba descompuesto ya en el féretro, se llevó las joyas de oro (un cordón, una cadena, el colgante y un anillo) y después volvió a ponerlo todo en su sitio para que el robo pasara desapercibido.
El sospechoso, F. R. S., de 32 años, al parecer es toxicómano y arrastra antecedentes policiales por otros hechos, según ha podido saber este diario.
Los investigadores de la Policía Judicial de Elche llegaron hasta el hermano del fallecido tras tomar diversas declaraciones al entorno familiar del difunto.
Desde el principio sospecharon de que el ladrón se encontraba en el círculo más íntimo del fallecido, puesto que solo profanó una tumba del camposanto y sabía exactamente lo que buscaba. Así, los investigadores apuntaron a alguien que supiera que el joven fallecido fue enterrado con varias joyas de valor.
De momento, el detenido no ha dado ninguna explicación a la Policía de qué le llevó a profanar los restos mortales de su hermano para conseguir unos cientos de euros. Hoy declarará ante el juzgado de guardia de Elche, que decidirá si lo envía a prisión provisional o lo deja en libertad con cargos.
Mientras tanto, los agentes que han llevado la investigación siguen trabajando para localizar el resto de los efectos robados, que podrían haber sido vendidos en alguna joyería o tienda de compraventa de otro, según detallaron fuentes próximas al caso.
