Un defecto de forma en el proceso por parte del colegio es lo que alega la Consellería de Educación para rechazar tramitar el traslado de la menor musulmana a la que el Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Novo de Arteixo sancionó por llevar el velo a clase. Su argumento: no existe expediente disciplinario previo. “El centro no cumple con la legalidad necesaria, lo que invalida el proceso”, explica la Xunta mediante un comunicado.

El pasado 3 de marzo la inspección educativa de la jefatura territorial de La Coruña solicitó el expediente disciplinario incoado a la alumna por parte del colegio por incumplir el reglamento interno al asistir a clase con la cabeza tapada, con el fin de estudiar el caso y tomar una decisión al respecto. El director del colegio, José Luis Fernández Pardo, respondió que “no existía” tal expediente, razón por la que el departamento autonómico invalida el proceso.

La inexistencia de este documento provoca la nulidad de la sanción impuesta a la alumna por parte del consejo escolar, ya que “hace imposible su cumplimiento”, razón por la que la menor “debe permanecer escolarizada” en el centro hasta que, “si procede, se imponga una sanción conforme a derecho”, se solicite el traslado por parte de los padres o se modifique el reglamento de régimen interno del colegio.

El representante municipal en el consejo escolar, el concejal de Terra Galega Xosé Márquez, se muestra sorprendido al conocer la decisión de la Xunta, no en lo que respeta a la anulación de la sanción si no en lo referente a la inexistencia del expediente disciplinario. “Quien debía tramitar este documento era el director por lo que hablaré con él para que me explique lo que ha sucedido”, destaca Márquez. “Me parece correcta la decisión de la Xunta, si las cosas no se hicieron bien habrá que arreglarlas”, dice, no sin antes recordar que “el reglamento está ahí para algo”.

El ex director general de Libertades Religiosas del Ministerio de Justicia, Juan Ferreiro, considera que el Ejecutivo autonómico ha tenido “muy buen criterio” en su decisión de anular la sanción a la menor por los “múltiples defectos de fondo y forma” a los que tanto él como el abogado de la familia, Iván Jiménez-Aybar, hicieron alusión en diversas ocasiones.

Los padres de la niña, Hakim Redouane y Asmaa Taouai, anunciaron ya la pasada semana su intención de emprender acciones legales contra la Xunta si ésta accedía a la petición del colegio por considerar que el centro escolar había incurrido en una doble falta administrativa ya que el acta del consejo escolar no hacía referencia en ninguna momento a la sanción, lo que priva a los progenitores de una información esencial y les deja sin opción de recurrir la decisión. Ahora la Consellería de Educación reconoce fallos en la actuación del consejo y advierte de la inexistencia del pertinente expediente disciplinario.

El conflicto por el uso del velo surgió cuando el órgano de representación del colegio inaugurado este curso aprobó el pasado mes de diciembre un reglamento interno que impide el uso de “boinas, viseras, pañuelos de cabeza y otras prendas que cubran la cabeza”, único centro de la localidad que lo prohíbe. Esta regla es incumplida por esta alumna musulmana de 11 años que asiste a clase con el hiyab, por lo que el colegió decidió sancionarla con “la suspensión del derecho a participar en actividades escolares o complementarias”.

A pesar de ello, la menor ha continuado acudiendo a clase con el velo, razón por la que el centro solicitó a la Xunta que se pronunciase sobre la legalidad del reglamento, respaldado por la administración autonómica que aseguró de forma reiterada su respeto por la autonomía de los centros.

Ante el incumplimiento reiterado de la normativa, el consejo escolar amenazó con aplicar las sanciones previstas, de 3 días a 1 mes de expulsión, aunque finalmente el pasado 28 de febrero el consejo escolar decidió solicitar su traslado por incumplir el régimen interno. El centro comunicó a la Xunta su resolución, pero “la inexistencia de dicho expediente disciplinario provoca la nulidad de la sanción”. La Xunta ha decidido no entrar “en el fondo del asunto” y se ha amparado en un “defecto de forma” para no ejecutar la sanción. Deberá ser el director del CEIP Novo de Arteixo quien determine el proceso a seguir.

La familia de la menor musulmana que acude a clase con velo se muestra satisfecha con la decisión de la Consellería de Educación de no tramitar el traslado de la niña a otro colegio por entender que el CEIP Novo de Arteixo no cumple “con la legalidad necesaria” al no existir un expediente disciplinario abierto sobre la menor. El padre de la niña, Hakim Redouane, que conoció la postura del Gobierno autonómico a través de los medios de comunicación, considera que se trata de una decisión “justa”. “Estamos muy satisfechos”, afirmó tras conocer la resolución de la Xunta de anular la sanción impuesta a su hija.

Redouane subraya también que la decisión ratifica que “no hay motivos para el traslado de la niña, que no ha hecho ninguna cosa mala”, e insiste en que “si en la elaboración del reglamento se ha incluido un error que lo modifiquen”. Además, se ha mostrado partidario de que en esta norma sobre la vestimenta de los alumnos en el aula “se incluya la excepción de los símbolos religiosos”, petición repetida tanto por la familia como por el abogado de ésta en base a las tesis sobre el reconocimiento del hiyab como un elemento religioso y también de identidad. El letrado recordó en diversas ocasiones que el Ministerio del Interior reconoce esta prenda como un símbolo de identidad, remitiéndose al hecho de que en su carné la menor lleve puesto el velo en la fotografía. Los padres, que habían rechazado el traslado de la menor a otro centro, estaban estudiando la adopción de medidas legales, aunque, por ahora, sus actuaciones se habían limitado al ámbito administrativo. “Ahora vamos a estudiar con el abogado las novedades”, ha apuntado Hakim Redouane al conocer la medida adoptada por la el Ejecutivo gallego.