En doce meses de prisión ha quedado fijada la condena para un acusado al que se considera culpable de haber cometido un delito de quebrantamiento de condena. Así lo recoge la sentencia dictada por el juzgado de lo penal número 1 de Orense, en el que se considera probado que Alberto Cazorla Horta quebrantó la orden judicial que le impedía acercarse a su compañera sentimental.

El caso tiene su origen en una actuación policial realizada el 6 de mayo del 2009. Varios agentes de policía que se encontraba en la estación de tren de la capital ourensana sorprendieron al denunciado en compañía de la mujer a la que, legalmente, no podía acercarse, por lo que de inmediato tomaron cartas en el asunto e informaron al juzgado.

Eso sí, el principal problema que ha tenido la magistrada a la hora de valorar penalmente los hechos, ha estribado en el hecho de que la mujer a la que protegía la orden había consentido que se quebrantase la medida cautelar, permitiendo pese a todo que su compañero sentimental estuviera con ella.

Termina por asegurar la magistrada respecto a esto, y teniendo en cuenta las últimas sentencias dictadas por la Audiencia provincial de Orense, que ese consentimiento no excluye que se haya quebrantado la ley por lo que condena al sospechoso. La sentencia es recurrible ante la Audiencia.