Más de 60 asociaciones han elaborado un manifiesto que, coordinado por la Asociación de Amigos del Camino (Agacs), solicita a la Unesco la “inmediata inclusión” del Camino Francés a Santiago en España en la lista del patrimonio mundial en peligro.

En un acto celebrado en Santiago, el presidente de la Agacs, José Antonio de la Riera, ha denunciado la “penosa dejación de las administraciones públicas españolas”, que, “lejos de defender un bien que es de todos”, aplican un “absoluto desprecio” a patrimonio jacobeo.

En esta línea, ha puesto como ejemplos de este “atentado contra el patrimonio” la destrucción de la calzada romana en Toques (Camino Primitivo) o la construcción del polígono industrial que atraviesa el Camino Francés en el municipio coruñés de O Pino.

De esta manera, ha lamentado que diversas administraciones locales de Galicia anunciaran “una alegación conjunta” ante la propuesta de delimitación del Camino Francés realizada por la Xunta, en la que los municipios piden que “ni se aumente un sólo metro la franja de protección actual –30 metros–“.

Finalmente, el presidente de la Asociación de Amigos del Camino ha calificado de “burla” la construcción del Parque Eólico del Río Oribio, en Triacastela (Lugo), en donde la aprobada declaración de impacto ambiental señala que “para minusvalorar el impacto sobre el Camino Francés los molinos eólicos deben ser adornados con motivos jacobeos”. Un hecho que, según la asociación, “rebasa ya todo sentido común”.

LISTA DE LA VERGÜENZA

Ante estos hechos, un total de 60 organizaciones encabezadas por la Asociación de Amigos del Camino ha solicitado que se inicien los trámites para la “urgente e inmediata” inclusión del Camino de Santiago en la lista de patrimonio mundial en peligro de la Unesco.

Esta inclusión, según ha explicado José Antonio de la Riera, “supondrá que el camino entre en la también conocida como lista de la vergüenza”, en la que se incluye el patrimonio de la humanidad que no “tienen la suficiente protección por parte de sus estados” y en la que “mayoritariamente hay bienes situados en el tercer mundo”.

Además, este hecho, tal y como ha concluido, “será un fuerte aviso para que los gobiernos se comprometan a la “protección del patrimonio”, ya que esta lista “constituye el paso previo a la descatalogación del la Ruta Jacobea como Patrimonio de la Humanidad”.