Quiso robarle a un tatuador en Brasil y éste le tatuó en la frente: “Soy ladrón y bobo”
Así le quedó la frente al joven
Venganza. Eso es lo que deseaba el propietario de la vivienda en Brasil luego de reducir al delincuente que había intentado robarle. Por eso no quería llamar a la Policía, como habría hecho cualquier ciudadano común.
El hombre trabaja de tatuador, así que no le costó mucho decidir qué castigo aplicarle al ladrón. Poco le importó que se trataba de un adolescente.
Lo sentó. Tomó la aguja y empezó a tatuarle la frente. El ladrón no opuso ninguna resistencia.
“Yo soy ladrón y vacilão (bobo, zopenco)”, le escribió.
Para completar la venganza, filmó el momento y publicó el video en internet. Hasta ahora, no se reveló la identidad de los protagonistas.
Será un ladrón pero hacer eso me parece bastante ilegal, no digo que no merezca castigo.
Es justicia y un modo de castigo eficaz “chapado a la antigua”, ese es el mejor castigo, lo más probable es que el ladron no lo haga de nuevo, hace tiempo también en Brasil, un poli sorprendió a un gráfitero rayando y el poli lo obligó a poner la cara para vaciarle el spray de pintura sobre el rostro:
https://www.youtube.com/watch?v=yvknKQW-sDs
Este tipo de castigo aparece en el libro de F.Kafka “En la colonia penitenciaria” pero con mucha más sofisticación: El castigo se le escribe en la piel, en sangre, al reo con una aguja guiada por un mecanismo llamado “La rastra” que tiene debajo un barreño para recoger la sangre con pequeños canales.
Brasil es un hoyo de violencia