Foto de familia de la Plataforma Antigestora de Vox Málaga.

Diez veces más militantes de Vox Málaga que los que había recientemente a en la reunión de afiliados en la sede provincial. La Plataforma Antigestora volvió a salir por la puerta grande tras la cena-mitin  celebrada ayer en la venta “El gato”, en la capital malagueña. Como el que tuvo lugar hace un mes en Benalmádena, el acto respondió plenamente a las expectativas.

Cuando tantos militantes de Vox acuden a un acto del sector crítico, aún sabiendo que pasan a estar en el punto de mira de una gestora tan incompetente como revanchista, es que algo muy grave está pasando dentro del partido verde en Málaga. Porque lo importante no fue la presencia de más militantes de los que la Gestora sería capaz de congregar nunca, sino el clima de repudio y rechazo a una forma de concebir la política que ha convertido a Vox Málaga en una caricatura de lo que fue.

Al clima de repudio contra la Gestora debemos unir el ambiente de unidad en torno a la figura de Antonio Pulido, muy aplaudido toda la noche. Y no se trataba del mejor día para este ingeniero cabal y juicioso, cuyo compromiso ético con Vox le ha llevado a transitar por el camino más bacheado. A mediodía recibió la notificación de su expulsión como militante por espacio de dos años. Eligieron el día de la cena-mítin de la Plataforma para aguarle la fiesta. No lo consiguieron. Lo que en cambio sí lograron es que se perciba en toda su magnitud el revanchismo y la pulsión sádista de algunos dirigentes. Si esto lo hacen con quien ha sido número dos del partido durante años, qué no le harían a cualquiera de ustedes. Debemos recordar que Pulido ha sido expulsado por denunciar la presencia de un acosador sexual en la sede del partido. Cuando un partido desfenestra a un coordinador por denunciar la presencia de niños en actos promocionales del Orgullo Gay. O cuando expulsa a uno de sus militantes más icónico por denunciar la existencia en Vox de un más que presunto depravado, entonces es que los dirigentes de Vox han perdido los principios, la dignidad, el decoro y la vergüenza.

Imagen de la cena de los miembros de la Plataforma Antigestora.

Hay un principal responsable, el ex suboficial Jacobo Vázquez, un personaje mediocre y gris a quien alcanzará más pronto que tarde la efemérides de San Martín. Se lo aseguramos. Jacobo Vázquez es un cordobés de piel cetrina y ducho en cosas que exigen discreción y prudencia. Este inútil político no formaría nunca parte de la dirección de una gran empresa privada. A su incapacidad gestora se añade su nulidad como orador. Oírle hablar en público exige una gran dosis de autocontrol para evitar las carcajadas. Cuando un personaje como éste tiene en sus manos decidir quién forma parte y quién no de Vox, es que entonces este partido merece acabar como Ciudadanos.

Antonio Pulido lo tiene claro. “El cáncer de Vox Málaga se llama Jacobo Vázquez”, señaló ayer en su intervención ante los afiliados, entre los que se encontraban el ex miembro de la Gestora, Pedro Barceló y el concejal en Villanueva de Algaidas, David Granados.

De izquierda a derecha, Armando Robles, Antonio Pulido y Ángel Gálvez, descendiente de Bernardo de Gálvez, uno de los héroes de la independencia de EEUU.

Pulido aseguró que la Plataforma Antigestora “ha venido para quedarse” y anticipó que, sin el apoyo de los críticos, el partido será sometido a un severísimo correctivo en las próximas elecciones. “Ya le hemos devuelto la ilusión y la esperanza a muchos afiliados”, subrayó.

Criticó el casi nulo poder de convocatoria de la Gestora, como prueba la práctica inasistencia de militantes a las mesas informativas. “Es la mejor prueba de que los militantes no se sienten representados por estos dirigentes”, apostilló.

Anunció reuniones sectoriales en numerosos puntos de la geografía malagueña, como la que el próximo viernes tendrá lugar con militantes de Marbella.

Durante su discurso, Pulido tuvo también palabras de reconocimiento hacia el director de AD, Armando Robles, presente en el acto y que fue muy aplaudido por los militantes críticos de Vox.

Reiteró Pulido su compromiso con España y con los valores consustanciales a nuestra Civilización occidental. En ese contexto se sumó a las muestras de apoyo que está recibiendo el coordinador en Mijas, Alberto González, por su cruzada en solitario contra el lobby gay, y reiteró la importancia de la familia como eje nuclear y vertebrador de la sociedad. “Jacobo Vázquez me ha echado por defender que nuestras hijas estén seguras. Proclamo sentirme orgulloso de lo que dije y de lo que volvería a sostener”.

Previamente a Pulido intervino el portavoz de la plataforma, Antonio Videra, profesor universitario de Psicología Social, quien detalló los ejes sobre los que gravitará la acción política de la plataforma, y desgranó al mismo tiempo algunas de las medidas que se pondrán en marcha.

Videra no desaprovechó la oportunidad de lamentar la deriva ideológica del partido en Málaga, así como la incapacidad de la Gestora para abanderar un proyecto colectivo que devuelva a Vox el papel hegemónico que tuvo hasta no hace mucho tiempo en Málaga.

En definitiva, el segundo éxito de Plataforma Antigestora en menos de un mes y la constatación de que la militancia inevitablemente tendrá que decidir en qué manos ponen el control y el rumbo de una nave que actualmente zozobra.