España se mete en cuartos tras derrotar a Croacia 3-5 en un montaña rusa de partido
La selección española ha sudado su pase a cuartos de final de la Eurocopa tras superar en la prórroga ante Croacia (3-5), en un partido en el Parken Stadion de Copenhague en el que los de Luis Enrique remontaron el tanto inicial de los balcánicos tras una jugada desafortunada y que Pasalic, en la prórroga, condenó al tiempo extra, donde Morata y Oyarzabal resolvieron.
A los 20 minutos, el guardameta Unai Simón falló en el control de un pase atrás de 30 metros de Pedri y el balón acabó entrando incomprensiblemente en la portería. Pablo Sarabia apareció para neutralizar el tanto antes del descanso (min.38).
Ya en el 57, Azpilicueta cabeceó al fondo de las mallas un buen centro de Ferran Torres para poner por delante por primera vez a ‘la Roja’, y 20 minutos más tarde era el futbolista del Manchester City el que parecía dejar sentenciada la contienda batiendo por bajo al meta croata.
Sin embargo, un gol de Mislav Orsic en el minuto 85 apretó el final del encuentro, y Mario Pasalic, ya en el descuento, forzó la prórroga en la capital danesa.
Tras una ocasión clara de los de Zlatko Dalic al inicio del tiempo extra, Morata enchufó un zurdazo a la escuadra que devolvió la esperanza a los españoles (min.100), que respiraron cuando Mikel Oyarzabal ponía el definitivo 3-5 tres minutos después. España se enfrentará el próximo viernes (18.00) en San Petersburgo con el ganador de la eliminatoria entre Francia y Suiza.
España metió un gol de chiripa (carambola) en la primera ola. Pero más adelante un tal Schiripa ha nivelado la bola.
Está claro que hay un árbitro Divino, que hila cada vez más fino.
Se prolonga la agonía, con un resultado incierto….
y hasta el último momento,
veo caras de cemento.
Hallábame yo en presencia del Oráculo en el Templo Olimpiaco del suburbio multiculti cuando de repente, desde la lejanía’, atravesando ventanas y paredes, cuerpos y almas, las voces de los apañoles pandereteros transmutaban en ondas tocapelotianas, directas, profundas, viscerales. En ese instante alcé la mirada al cielo y vi a nuestro señor volando en falcon. Pude oír lo que decían: -Mi señor, mi señor, ¿lo oye? Son los problemas de “este país” diluyéndose. -Claro que lo oigo mi querido esbirro, claro que lo oigo, cada gol de la roja fue pactado por un rojo. En cada gol, a cada grito,… Leer más »