Juan Jara

ED- Jara conoce bien el interior de Vox, a Santiago Abascal y a todos y cada uno de sus dirigentes, pues fue vicepresidente de Vox. Todavía dentro denunció la opacidad de la financiación y la falta de democracia interna, lo que motivo su expulsión. No en vano, “Santiago Abascal no cree en la democracia”. Sobre todo ese entramado de la secta Yunque, el clan Ariza y Vox tiene que caer la luz del Estado de Derecho. “La fiscalía anticorrupción debe investigar la financiación de Vox”.

Me consta que usted ha leído con detenimiento los tres informes que hemos publicado sobre las estrechas relaciones entre Vox, el clan Ariza y la secta Yunque. ¿Cuáles son las cuestiones que más le han llamado la atención o le han sorprendido?
Lo cierto es nada de lo escrito me parece muy sorprendente dada la trayectoria que estamos conociendo de Vox casi a diario. Lo que sí me sorprende es que es no parece influir en la efervescencia antidemocrática que expelen y desde luego que ningún fiscal haya pensado en abrir unas diligencias para aportar luz y ley a tanta trapisonda, nunca desmentida por canales oficiales.

Vamos a entrar por el Yunque, si le parece. Cuando usted estuvo en un puesto tan relevante como vicepresidente de Vox, ¿percibió la presencia del Yunque?

Nunca. El Yunque esta, se percibe a diario si se leen las campañas de HazteOir o CitizenGO o Profesionales por la Ética o Abogados cristianos, la convergencia es incuestionable. La campaña de vallas publicitarias me parece un fraude de Ley. Es como si desde fuera del ámbito de la política alguien con muchos medios económicos incitara a pensar mal de mi competencia, defraudando la libre competencia en el seno de la campaña electoral. Estoy realmente sorprendido, aunque con una Fiscalía de rodillas ante la Ministra Dolores Delgado, casi todo es posible.

Muchas de las decisiones adoptadas con referencia al modelo de partido recuerdan el planteamiento de una secta o de un partido totalitario, tales como total control por la cúpula, eliminación completa del principio de representación. ¿Era previsible esa deriva y qué opina de ella? ¿puede influir cierto mimetismo respecto al Yunque?

Abascal no defrauda. No cree en la Democracia y es coherente. Lo que no adivino es como va a Gobernar/Domeñar a todos los cargos públicos que sea capaz de obtener…generales, catedráticos, etc con actas de concejal o diputados que dicen que van a obtener. Si en algún rincón de su alma española queda algo de decoro, honra o decencia…en estos españoles, ellos serán quien derroquen a este Despota Máximo que es hoy Santiago Abascal. Vox no sobrevivirá a Abascal o Abascal no sobrevivirá en Vox… “Por sus obras lo conoceréis”. Abascal es hoy tan peligroso para España y nuestras Libertades como lo es Pablo Iglesias. El poder transforma a un mala semilla en un Ente amorfo que todo lo engulle. Estoy seriamente preocupado por todo lo que nos pueda tocar vivir.

¿Cree usted que el Yunque, una secta católica de origen mexicano, puede estar financiando a Vox?

Desconozco si lo hacen. Pero desde luego eso debiera ser objeto de Investigación Judicial. Así como el dinero de la primera campaña de Alejo Vidal-Quadras o las captaciones de fondos vía micromecenazgo, lo que me gusta llamar el pitufeo verde.

La compra de la Nueva sede por parte del actual Vicepresidente Primero para un mes después alquilársela a Vox. En general Vox habla claro y actúa oscuro. Ese es su diseño corporativo.

Según su sucesor en el cargo, Víctor González Coello de Portugal, Vox va a cerrar La Sexta, pero al tiempo mantiene unas relaciones oscuras y comerciales con el clan Ariza. ¿Alguna opinión al respecto?

La libertad de Prensa es en cualquier Democracia el cuarto poder. Nadie que crea que puede cerrar el Gara o el Avui, la Sexta ebiera salir impune de su intención. Eso es golpismo, es dictadura, es profundamente peligroso…y eso que aun no tiene el Poder Instrumental de ninguna Administración. Tengo miedo de ver a personalidades como la de este ciudadano español tomando decisiones por todo. Tenemos la obligación de seguir muy de cerca esta oleada de “abanderamiento nacional” que está hueco salvo para los intereses de unos pocos.