¿Identitarismo versus racialismo?
Me da a mi que para los partidos que se proclaman patriotas e identitarios, el racialismo es una cuestión menor. ¿Se puede ser identitario sin ser racialista? No desde nuestra opinión. No solo eso. No se puede defender recta y honestamente la opción identitaria sin contemplar como irrenunciable la defensa del nutriente étnico como base fundamental de las sociedades nacionales. Es Europa la que ha llevado al mundo la filosofía griega, el derecho romano, el Renacimiento, la universidad, la imprenta, el cine, la ciencia, las operaciones de cataratas, la penicilina, la lucha contra el dolor, la neurocirugía, los implantes ortopédicos, los trenes, los aviones, los automóviles, la radio, el teléfono, la televisión, entre otras miles de aportaciones sin las cuales la humanidad estaría hoy más cerca de Atapuerca que del siglo XXI. El genio europeo no vino determinado por los ríos o las montañas de sus territorios, por sus paisajes o sus atardeceres, sino por la herencia biológica transmitida desde hace centenares de años. Si sobreviven en el futuro historiadores y científicos que sean lo suficientemente libres, darán testimonio de este periodo de nuestra historia como el estado de degeneración más alto alcanzado nunca por el hombre. La degradación moral nos está conduciendo a que renunciemos incluso a la supervivencia de nuestra identidad colectiva, la que ha dado al mundo a los mejores hombres. O a que aceptemos sin rechistar que comunidades extranjeras quieran imponer el modo de vida del que supuestamente vienen huyendo.
En este momento culmen de la maldad humana se pretende que el hombre occidental se diluya como un azucarillo blanco en un vaso de cacao. Este proceso de evaporización de las etnias autóctonas europeas es seguramente la mayor y más perversa acción criminal concebida por el hombre. A diferencia de otros, este genocidio se está produciendo con la aceptación voluntaria de la mayoría de sus potenciales víctimas. Qui prodest? ¿A quién o a qué objetivos favorece todo esto? El lector responda.
¿Responde o no a un plan favorecedor de los objetivos dominantes de unos pocos que se pretenda africanizar Europa y no europeizar África, con lo que europeos y africanos saldríamos ganando? ¿Qué sentido tiene oponerte a la exhumación de Franco, al modelo autonómico, al proceso rupturista abierto en Cataluña o a la degradación de nuestros símbolos, si estas cuestiones, con ser importantes, carecerán de interés alguno a la vuelta de cuatro o cinco esquinas generacionales, en el marco de sociedades que serán étnica y culturalmente distintas a las que amamos y defendemos? ¿Por qué partidos como Vox no se enfrentan a estos asuntos e incluso prefieren asumir posiciones buenistas, que no pasan de ser una manifestación estúpida del relativismo? ¿Cómo es posible que un partido tan respetable como Democracia Nacional concurra a las elecciones coaligado con una formación como AES, para quien el debate antropológico debe someterse al principio medroso del “juntos como hermanos”? Hace poco hablé por teléfono con una de las personas que más se significó contra la exhumación de lis días restos cadavéricos de Franco. Fue con motivo de un viaje relámpago a Madrid, donde quedé hondamente impresionado por el número de extranjeros de origen extraeuropeo en sus calles. Mi interlocutora quitó yerro al que para ella debía ser un asuntillo menor, amparándose además en que vivía en un chalé de las afueras, lejos del mundanal multiculturalismo. Por desgracia, a los responsables de la falsamente llamada derecha identitaria, salvo excepciones como la del catalán Josep Anglada, el reemplazo demográfico no les quita el sueño. Los de Vox dicen abiertamente que no debe preocuparnos la llegada masiva de inmigrantes suramericanos, mientras que algunos dirigentes o cónyuges de dirigentes de AES colaboran en los comedores sociales de Caritas. El relativismo antropológico de esta gente es peor aún que la postura proinmigracionista de la izquierda.
A la hora de justificar el cambio de costumbres asumidas como respetables por la gran mayoría, se emplea un lenguaje manipulador que retuerce las palabras y distorsiona los conceptos para que la ciudadanía destinataria del mensaje se convierta en una masa blanda y viscosa que se moldea a gusto del demagogo. La lucha ideológica de AD consiste sobre todo en pertrechar intelectualmente a esa masa blanda y viscosa contra el discurso ideológico de la izquierda a través de los medios de comunicación de masas.
Por desgracia sólo nos tenemos a nosotros para revertir una situación absolutamente envenenada. El reto es de una dificultad quimérica, a qué engañarnos. Apenas AD representa ese estado moral de conciencia identitaria contra los planes aniquiladores de las elites globalistas. Las actuales fuerzas parlamentarias de izquierda y derecha neoliberales apuestan por la agenda del multimillonario George Soros para seguir colonizando España con poblaciones halógenas que no nos hacen ninguna falta. De seguir la actual progresión, en menos de treinta años, los españoles de origen representarán ya menos del 50 por ciento de la población. La promoción del abortismo, las trabas sociales, económicas y laborales que sufren los españoles que quieren crear nuevas unidades familiares, la influencia del feminismo radical en millones de mujeres, la criminalización de los varones, el asentamiento del individualismo y la expansión del hedonismo en las relaciones humanas, así como el envejecimiento de la población, hacen ya de España un país incapaz de regenerar su propio tejido social y productivo. Se nos pide que apoyemos y creamos en formaciones y colectivos que ignoran estos asuntos, mientras convierten en el eje de su discurso la cuestión catalana o la exhumación de Franco.
Estamos por desgracia en manos de políticos que creen en un mundo globalizado sin fronteras nacionales y sin identidades propias, que aplican medidas conducentes a nuestra sustitución demográfica, contando para ello con la colaboración de una masa idiotizada que apoya su propia destrucción en favor de un mundo supuestamente mejor, donde no habrán barreras nacionales, étnicas, raciales ni culturales, donde todos nos fusionaremos en un mismo bloque multicultural, sin orígenes claros y sin nada que defender porque careceremos de la fuerza motora identitaria para hacerlo.
Nos llaman racistas y xenófobos, nos llaman homófobos e intolerantes, nos llaman con mil y un sambenitos, simplemente porque no renunciamos a conservar lo que nos resulta más preciado y porque deseamos que todos los pueblos y las razas prosperen y se desarrollen solidariamente en sus espacios naturales, no en los de otros pueblos y razas. ¿Quiénes se oponen a lo que nosotros defendemos pacíficamente? Sobre todo esos grupos que contemplan el alto rendimiento intelectual y la fecundidad creativa de las etnias caucásicas como una amenaza para sus pretensiones de reordenar y dirigir el mundo. Por desgracia lo controlan casi todo. La mayoría de los políticos y creadores de opinión europeos trabajan para ellos desde todas las instancias. Ellos son los encargados de dictar las normas y de tener engrasada la maquinaria demoledora de nuestras sociedades con el linimento de la ingeniería social.
Si desaparece el gen europeo, si permitimos que desaparezca, habrá desaparecido entonces la más bella obra de Dios y la razón misma de nuestra existencia. Quienes abogan por la multiculturalidad en Europa, en realidad están destruyendo la verdadera diversidad humana, salvo que se nos quiera hacer creer que los nocturnos de Chopin tienen el mismo valor artístico que una danza zulú.
El destino de una civilización depende de su acervo genético y de que se mantenga el tipo de hombres que la crearon. Si a los excelentes se les convierte en minoría y se fomenta la natalidad sin freno de las personas con más bajo cociente intelectual, entonces la cultura y el progreso humano deviene otra cosa distinta.
Quiera Dios que estemos ante el umbral de un acontecimiento que ya tuvo lugar en Europa, unos 300 años antes de nuestra era: una alianza de polis griegas lideradas por Esparta y Atenas, cunas de nuestra civilización occidental, se impusieron al Imperio Persa, que amenazaba con destruir Grecia y convertir a los griegos en esclavos. Para derrotar a un enemigo mucho más poderoso en medios y número, los estados helenos se unificaron bajo el sistema político que existía en la polis de Esparta, renunciando a parte de sus libertades a cambio de su supervivencia. Y lo consiguieron.
Por desgracia para los descendientes de aquellos europeos, el daño está siendo tan devastador que su reparación mucho me temo que no podrá proceder de las mismas instituciones que lo han provocado.
Bajo la premisa de que los ‘persas’ de hoy son mucho más malvados y poderosos que los coetáneos de Jerjes, el mundo occidental no tiene más opción que unirse bajo un mismo sistema identitario, que recorte algunos derechos para salvar el más importante de todos: la conservación de nuestra herencia genética. Con ella, la creación divina seguirá teniendo sentido.
Entre los miles de insultos contra los españoles desde un punto de vista racial que uno ha leído en libros y en foros de internet por parte de medio mundo, recuerdo uno de un italiano del norte, lleno de un odio visceral contra España: “los españoles no tenéis raza, sois un pueblo mongrel”. Yo le rebatí con datos científicos esta calumnia… Pero en algo andaba en lo cierto: si bien de cuerpo, salvo minorías, no es así, el español carece de conciencia racial, tiene un “alma mongrel”. La prueba está en que solo en AD se trata esta cuestión fundamental.… Leer más »
Recuerdo perfectamente que, durante los 40 años que estuvo Franco como Jefe del Estado, loas personas procedentes de Hispanoamérica tenían derecho a solicitar la nacionalidad española con dos años de residwncia en nuestro país. Además, los nativos de Guinea Ecuatorial (de raza negra, obviamente) adquirían la nacionalidad española desde su nacimiento y en España nadie se planteaba su expulsión por no ser de raza blanca.
Esta noticia confirma mi predicción de que algunos paises de Europa Occidental se verán inmersos en una guerra civil, que será una guerra entre los partidarios de la civilización occidental y los partidarios de la civilización islámica.
https://www.zerohedge.com/news/2019-07-14/sweden-war
No se puede hablar más claro. Y yo voy a dar mi respuesta: la oligarquía supranacional, capitalista-financiera y sionista es la que promueve la substitución racial y étnica de Europa porque es la que se beneficia de ella. En efecto, el sionismo original, que pretendía fundar y acabó fundando en 1948 un Estado judío de acuerdo con el mandato bíblico, aunque secularizado, de su dios Yahvé, ha extendido su concepto, de forma que ahora ya no se trata sólo de tener un Estado propio en una tierra determinada, sino también un Estado en todo el mundo para establecer un Gobierno… Leer más »
Es un error atribuir a Israel todo lo que está pasando en las naciones occidentales. El interés de Israel es su supervivencia en un Oriente Medio mayoritariamente árabe y musulmán y la única tabla de salvación de Israel es conservar la amistad con el país líder del mundo occidental, es decir, con Estados Unidos. Los intelectuales de izquierda que han creado el marxismo cultural son, en su inmensa mayoría europeos, no israelíes.
Veo que no ha entendido usted bien. El sionismo va más allá de Israel; más aún, lo precede. Además olvida usted cómo se fundó ese Estado criminal, racista y genocida. Parece que también olvida que los grupos de presión sionistas son los que mandan en la sombra al Gobierno del tío Sam (más bien Sem).
Y en cuanto al marxismo cultural, “europeos”… de origen judío en su mayoría; casi todos, de la Escuela de Frankfurt: Weil, Fromm, Adorno, Hirschfeld, Marcuse, Horkheimer…
Y una cosa más (que olvidé poner en mi comentario anterior): yo no he dicho que el marxismo cultural sea una creación de israelíes, o sea, de ciudadanos de Israel. ¿Pero será posible que casi siempre me contradiga alguien con problemas de comprensión lectora?
Precisamente D. Armando lo que hay que recuperar es el instinto de conservación…
Obviamente, no se puede ser identitario si no se es mínimamente racialista. El que diga otra cosa es un farsante, sin duda.
En mi opinión, una nación multi-racial puede tener futuro pero una nación multi-cultural está condenada, más pronto o más tarde, a un enfrentamiento violento. Eso es lo que le espera a las naciones multi-culturales de Europa Occidental. El islam es inasimilable y tratará de imponerse cuando se vea con suficiente poder demográfico para hacerlo. Posiblemente Francia, primero, y Suecia, después, serán dos paises europeos en los que se instauren, durante algunos años, sendos gobiernos militares para restablecer la homogeneidad cultural que existía en cada uno de esos paises a principios del Siglo XX.
Un matiz: los países multirraciales que han “funcionado” ha sido gracias a un sistema de castas con el que todas las razas o subrazas implicadas han estado de acuerdo. Ejemplos: la India actual y el Israel actual. Sistema de castas significa que cada raza solo engendra con los de su propia raza o casta. Las castas en sí mismas son linajes, a veces de una misma raza, pero de diferentes clases sociales. Y cada raza y cada casta viven en una región específica del país para no interferirse unas con otras. Simplemente cooperan entre ellas en pro del país común.… Leer más »
¿Qué tiene que ver el sistema de castas con la identidad étnica o cultural?. En la India existen muchas etnias pero solamente existen dos culturas: la hindú, que es la mayoritaria, y la islámica, que fue introducida por los invasores musulmanes. Dentro de la cultura hindú existen las castas que es algo parecido a las clases sociales en los paises occidentales; por ejemplo, los “intocables” son los más pobres mientras que los “brahmanes” forman la clase social dominante, pero todos ellos son hindúes.
América “Latina” es mutiracial, sin ser muticultural y son sociedades corruptas, violentas, infantiles y, sobre todo, diferentes de España. El discurso de Ud. es el típico discursito políticamente correcto y suicida cercano a VOX, intereconomia y losantos. Es el discursito de millones de españoles conservadores católicos que no saben el valor que tiene pertenecer a la raza blanca, y que no tienen problema con despojarse de ese don tan precioso. Imagino que Ud. disfruta mucho paseando por el centro de Madrid rodeado de venezolanos, colombianos, dominicanos, ecuatorianos, etc; más que de españoles. Y que no tiene problema en escuchar el… Leer más »
La mayoría de los argentinos y de los chilenos son descendientes de europeos, es decir, son de raza blanca. Por otra parte, la corrupción en los paises de América Latina no es muy diferente de la corrupción que existe en España o en Italia. ¿Por qué será que en los paises protestantes la corrupción de políticos, empresarios, etc., es mucho menor que en los paises católicos?.
1) “Descendientes de europeos”? Sí y también de naturales americanos. Se llama mestizaje. La mitad aproximadamente de los argentinos tienen hoy adn amerindio. Chile es en torno a un 85% mestizo. No tiene más que ver sus respectivas selecciones de fútbol. 2)America Latina e Italia, sobre todo el sur (lo más mezclado con elemntos extra europeos) son más corruptos que España (salvo, tal vez, Andalucía, donde hay por cierto más personas de “la etnia” en España). El sur de Alemania es católico y es lo más próspero de Alemania. La cuestión central, antes que la religiosa, es la referida en… Leer más »
P. S. Le reconozco que la corrupción en Chile es bastante baja y similar a España (pues en la propia “Latino” América hay grandes diferencias; diferencias entre etnias amerindias distintas, y entre el grado de elementos africanos. La sociedad chilena es la que mejor funciona).
Pero en cuanto a fenotipo y estilo los chilenos son otro pueblo, marcadamente diferenciado del español. ¿No cree que el pueblo español tiene derecho a conservar su identidad?
Harán otras cosas.Además me acuerdo del famoso asunto el “convoluto”…
En 1990 se dijo que la homosexualidad no era una enfermedad mental, ya vereis cuan poco tardan los psicólogos y siquiatras en decir que la xenofobia y el racismo es una enfermedad mental, se podrá ser maricón pero no racista, si es que esta gente le ha dado la vuelta a todo ellos que son los clérigos de la nueva religión le han dado la vuelta a todo lo que antes era bueno ahora es malo y viceversa. Decía Aristóteles que para que haya verdadera democracia, los ciudadanos deben ser de una raza homogénea, de lo contrario se volverá en… Leer más »
Me parece que fue a principios de los años setenta del siglo pasado (no en mil novecientos noventa) cuando en un congreso de la Asociación Americana de Psiquiatría el |lobby| homosexualista movilizó a sus manifestantes para que irrumpieran en la sala e intimidaran y amenazaran de muerte a los psiquiatras y psicólogos allí presentes, la gran mayoría de los cuales sostenía que la homosexualidad era una enfermedad mental y que como tal debía figurar. Al final, y ante tan aplastantes “argumentos” de los manifestantes homosexuales, el congreso aprobó suprimir la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales, claro… Una prueba… Leer más »
Lo natural en el ser humano es ser social y racialista. Es decir, social sólo con los de tu raza o estirpe.
Eso por mucha ingeniería social y muchas leyes que te metan en la cárcel, eso no se va a cambiar porque está dentro nuestro.
Lo que pasa, don Armando, es que somos unos acomplejados.