A la derecha, Santiago Abascal (Vox).

LR.- Se trata de “Corazón español”, un foro cercano a Vox, que a sí mismo se identifica con “la tradición hispano católica”. Uno de sus usuarios (“Hispanorromano”) introduce un hilo respondiendo a un artículo reciente de AD en el que se priorizaba la identidad étnica de España al mantenimiento de su unidad territorial. El argumento sería de primer curso de identitarismo: los habitantes de una nación son su principal nutriente. Una Alemania sin alemanes de origen sería otra cosa bien distinta al país que hoy conocemos. Las sociedades nacionales no han sido conformadas por sus ríos, por sus bosques, por sus mares, por sus montañas, sino por sus habitantes, vinculados a una determinada etnia y a unas condiciones culturales propias. Advertíamos al respecto que España “sí puede dejar de serlo, al menos la España que siempre hemos conocido, si no se pone fin a los flujos migratorios provenientes de África, Medio Oriente y Suramérica”.

En sintonía con los ideales que preconiza la derecha anglosionista, la cuestión migratoria es secundaria para Vox. De hecho defiende el relativismo antropológico salvo para oponerse a la inmigración islámica. Nosotros, en cambio, sostuvimos que la cuestión catalana y otros conflictos territoriales eran un riesgo menor en comparación con la pérdida de nuestra identidad racial colectiva. A los chicos de Abascal no les ha gustado. Suponemos que a Sheldon Adelson tampoco.

Esto nos responde “Hispanorromano” de forma harto desabrida: “Me ha parecido interesante un artículo que publica la pocilga de Alerta Digital contra VOX. No por el hecho de ir contra VOX sino por los argumentos que esgrime, que delatan el verdadero trasfondo de las pulsiones identitarias, muy ajenas a la preocupación por la unidad de España que en estos momentos tenemos todos. Se diría que incluso están molestos por la ola de indignación contra los separatistas catalanes que se ha traducido en que muchas personas cuelguen banderas españolas de sus balcones. Pues nos desvía del único tema que les preocupa a estos ideólogos: la raza y, secundariamente, la agenda “geopolítica” que les marcan algunas embajadas. El artículo pretende ser una crítica a VOX pero al final es una radiografía del alma identitaria que involuntariamente deja al desnudo sus vergüenzas. Marco en negrita lo que considero más relevante: El término pocilga describe a la perfección lo que se haya tras ese panfleto pretendidamente periodístico. El curilla leonés que tienen en nómina debe de echarle horas extras al confesionario, si es que en verdad son tan católicos como presumen y no se trata de simples ‘fachas’ (de fachada). En todo caso, repugnante la intención del artículo, ya se trate de sembrar el racismo y la xenofobia como de promover la deriva de vox hacia ese extremo”.

Los comentarios de los lectores no se quedan atrás: “Vomitivo el texto, rastrero, ruin y mezquino”, escupe el usuario don Fernandito. Los insultos alcanzan incluso al Padre Jesús Calvo. “El término pocilga describe a la perfección lo que se haya tras ese panfleto pretendidamente periodístico. El curilla leonés que tienen en nómina debe de echarle horas extras al confesionario, si es que en verdad son tan católicos como presumen y no se trata de simples ‘fachas’ (de fachada). En todo caso, repugnante la intención del artículo, ya se trate de sembrar el racismo y la xenofobia como de promover la deriva de vox hacia ese extremo”, escribe otro.

Sorprende que quienes se definen como patriotas mimeticen tanto los recursos semánticos de quienes pretenden acabar con las patrias europeas en beneficio de unos pocos.