Imagen de la factoría de Nissan en la Zona Franca de Barcelona.

La factoría Nissan de la Zona Franca de Barcelona dejará de fabricar dos modelos, el Pulsar y el Elavia, para centrarse en la fabricación de la furgoneta NV200 y el modelo «pick-up» de una capacidad de carga de una tonelada y que se produce para las marcas Nissan, Renault y Mercedes Benz con los nombres comerciales de Navara, Alaskan y X-Class, respectivamente. La salida de los citados modelos de la cadena de montaje no ha sido compensada por nuevos proyectos, salvo una versión eléctrica de la NV200, por lo que es previsible un descenso de la producción de esta planta. Pese a ello, la compañía ha declarado que no tiene previsto realizar un recorte de plantilla que, en estos momentos, se sitúa en el entorno de los 4.000 trabajadores. Estos planes de reducción de modelos se pondrán en marcha antes del verano.

Aunque oficialmente la compañía ha afirmado que la situación política de Cataluña no ha influido de ninguna manera en esta decisión industrial, lo cierto es que el independentismo asusta a los ejecutivos del sector ya que, en el caso de que llegara a concretarse el proceso y la comunidad tuviera que abandonar la Unión Europea, los nuevos aranceles que se impondrían a los productos salidos de Cataluña harían imposible la venta de los coches Nissan en los mercados de la UE.

Los dos modelos que se retiran de la producción de la planta de la Zona Franca barcelonesa son el Pulsar, que es un turismo compacto con motores diésel o gasolina y que, en opinión de la compañía, había ya llegado al final de su ciclo de vida. La marca tiene en este mercado una alternativa más moderna en la figura del Nissan Leaf. Por su parte, el Evalia es la denominación de la versión de pasajeros de la furgoneta NV200. Este modelo únicamente se producirá a partir de ahora en versión de motores eléctricos como una variante de la NV200 comercial. Seguirá haciéndose en la planta catalana, pero su mercado potencial se reducirá considerablemente a pesar de que la marca estudia la introducción de una nueva batería de 40 kw, con hasta 270km. de autonomía.

Para Paul Willcox, presidente de Nissan en Europa, la decisión tomada «es fruto de un cambio en la demanda de mercado de nuestros clientes europeos y de una nueva tendencia. De ahí que el enfoque de Nissan sea reforzar nuestro liderazgo en el segmento de vehículos eléctricos y crossover».

En el comunicado hecho público por la empresa, Nissan afirma su voluntad de mantenimiento de la totalidad de la plantilla actual de la factoría, que es de unos cuatro mil trabajadores. La planta de la Zona Franca, comenzó su actividad en 1983 y produjo durante el último año 110.000 vehículos.

Fuente: La Razón