ED.- La vinculación entre el nacionalismo gallego y el vasco es evidente. Les une una visión encaminada a una tierra independiente de España, el rechazo al Estado y un fuerte sentimiento identitario. Por ello, formaciones como BNG y Bildu comparten, a menudo, personal. Es el caso de Pernando Barrena, asesor del Bloque en el Parlamento Europeo.

Barrena fue candidato en el año 2019 por Bildu en las elecciones europeas. Nacido en Navarra, fue miembro de la Mesa Nacional de Herri Batasuna hasta el año 2001. Después, pasó a ser miembro de la propia dirección.

El nacionalista vasco fue detenido en numerosas ocasiones y fue procesado en varios sumarios contra ETA. De hecho, llegó a ser investigado por 108 delitos entre los que se encontraba desórdenes públicos, coacciones y estrados terroristas durante la huelga general promovida por Batasuna en el año 2006. Barrena salió en libertad bajo fianza pero fue en el 2008 cuando se le detuvo de nuevo bajo la acusación de integración en organización terrorista. El ahora asesor del BNG pasó dos años en prisión preventiva de la que salió bajo fianza de 50.000 euros.

Barrena reconoció en 2016 su vinculación con ETA para evitar entrar en prisión y asumiendo una inhabilitación de un año y ocho meses.

Fueron tres años después cuando Bildu le propuso como candidato tras la renuncia de Josu Juaristi implicado en un caso de violencia de género. Ejerció entonces como eurodiputado hasta finales de 2022 cuando cedió el puesto a la representante del BNG.

En el año 2020, Barrena volvió a provocar polémica al asegurar que la obra de Fernando Aramburu, Patria, era un relato de «los torturadores»: «Patria no es el relato, es el relato de una de las partes: la del constitucionalismo español, gran patronal, los parapoliciales, los tribunales de excepción, los torturadores…», opinó en sus redes sociales.