El periódico estatal chino Global Times acusó el miércoles al gran futbolista argentino Lionel Messi de tener “motivos políticos” para no jugar durante un partido amistoso esta semana entre su club de fútbol, ​​el Inter Miami, y el Hong Kong XI, el equipo local.

El Inter Miami de Messi, en el que también participa el veterano de la Copa Mundial de la FIFA Luis Suárez, se encuentra actualmente en una gira mundial promocionando el equipo y jugando partidos amistosos con partidos locales. El equipo estaba programado para jugar contra el Hong Kong XI el domingo y la presencia de Messi en la ciudad había causado un frenesí tanto en Hong Kong como en la China comunista, atrayendo a 40.000 personas al estadio esperando ver a Messi y Suárez en el campo. Sin embargo, ninguno de los dos disputó el partido, supuestamente por motivos de salud.

Los funcionarios de Hong Kong controlados por el Partido Comunista se han unido a la propaganda estatal china para condenar a Messi y han aumentado la intensidad de sus condenas tras la aparición de Messi en Tokio, Japón, el miércoles, en la que jugó durante más de 30 minutos contra el equipo local Vissel Kobe. Luis Suárez, jugador uruguayo con seguidores internacionales, también jugó el partido del Vissel Kobe, indignando a China.

Antes del incidente de esta semana, Lionel Messi gozaba de una enorme popularidad en China, al igual que en la mayor parte del mundo fuera de Estados Unidos. La superestrella del fútbol es considerada uno de los mejores jugadores de todos los tiempos y logró la primera victoria de Argentina en la Copa Mundial de la FIFA desde 1986 en 2022, lo que provocó lo que se considera la asamblea de personas más grande en la historia de Buenos Aires: aproximadamente 5 millones de seguidores.

Messi visitó la China comunista en junio, apareciendo en una transmisión en vivo promocionando productos vendidos por el gigante del comercio electrónico Alibaba, amigo del régimen, y jugando un partido en el cumpleaños del dictador genocida Xi Jinping. Messi no aprovechó la oportunidad para condenar públicamente al gobierno chino por su actual genocidio del pueblo étnico uigur del Turkestán Oriental, su represión extrema de cristianos y musulmanes o sus décadas de violencia contra disidentes políticos anticomunistas.

El Global Times impugnó la “integridad” tanto de Messi como del Inter Miami el miércoles por no aparecer en el partido de Hong Kong, afirmando que Messi parecía severo y desagradable en Hong Kong, mientras que parecía jovial y cálido en Japón.

“A diferencia del partido amistoso disputado hace tres días en Hong Kong, el jugador argentino Lionel Messi salió del banquillo y jugó 30 minutos, demostrando una buena condición física”, afirmó el medio estatal .

“A diferencia de Hong Kong, participó en actividades comerciales y se tomó fotografías con otras celebridades en Japón. Al mismo tiempo, saludó a los fanáticos con una sonrisa”, continuaron las quejas, “lo que contrasta marcadamente con su reacción inexpresiva y práctica cuando se saltó la ceremonia de premiación donde se suponía que los jugadores serían premiados por el Jefe Ejecutivo de Hong Kong”.

“Se despertó mucha más decepción e ira cuando la estrella argentina, que parecía impasible y reacia en Hong Kong, adoptó una conducta completamente diferente en Japón”, criticó el Global Times en un artículo separado publicado el mismo día. “El miércoles por la noche, Messi jugó durante más de 30 minutos en un estadio no tan lleno en Japón con aparentemente buen humor, justo después de que se publicara un comunicado en su cuenta en las redes sociales chinas”.

Tanto Messi como Inter Miami dieron explicaciones achacando su ausencia en el partido a una lesión.

“Fue mala suerte no poder estar en el partido de Hong Kong. En el primer partido de la gira en Arabia [Saudita] sentí molestias en el aductor [músculo de la pierna], por eso salí”, dijo Messi en rueda de prensa tras su ausencia en Hong Kong. “En el segundo partido jugué los minutos que jugué para ponerme a prueba… Luego fuimos a Hong Kong y tuvimos el entrenamiento a puertas abiertas y salí por la cantidad de gente que teníamos y porque también había una clínica con el que hacer los niños y yo quería estar presente y participar”.

“Pero la verdad es que las molestias continuaron y me costó mucho jugar. Lamentablemente, cosas del fútbol. En cualquier partido alguien puede resultar herido. A mí me pasó”, continuó el jugador. “No pude estar en el partido de Hong Kong y fue una pena”.

En una declaración al periódico más destacado de Hong Kong, el South China Morning Post , el Inter Miami se disculpó porque Messi y Suárez no jugaron (el Global Times destacó que Messi no se disculpó personalmente, solo explicó su situación).

“A pesar de nuestras mejores intenciones, entendemos que ha habido decepción por la ausencia de Lionel Messi y Luis Suárez en el partido del domingo y lamentamos que los dos jugadores no hayan podido participar”, dijo el club. “Creemos que es necesario expresar que, lamentablemente, las lesiones son parte del hermoso juego y que la salud de nuestros jugadores siempre debe ser lo primero”.

“Es una parte del hermoso juego que es cruel y afectó nuestra visita a Hong Kong en esta ocasión. Mientras continuamos consumiendo los titulares y la negatividad hacia las diferentes partes interesadas, nos sentimos obligados a reiterar la realidad de este tipo de lesiones deportivas”, expresó Inter Miami.

El Global Times calificó ambas explicaciones de “no convincentes” y acusó tanto al club como a su jugador de intentar potencialmente hacer una declaración política anticomunista.

“Las explicaciones de Messi y del Inter de Miami no son convincentes y hay muchas especulaciones sobre las verdaderas razones detrás de esto”, dijo el portavoz del gobierno. “Una teoría es que sus acciones tienen motivos políticos, ya que Hong Kong tiene la intención de impulsar la economía a través del evento y las fuerzas externas querían deliberadamente avergonzar a Hong Kong con este incidente”.

“A juzgar por la evolución de la situación, no se puede descartar la posibilidad de que se produzcan estas especulaciones”, concluyó.

Messi no tiene antecedentes de activismo político contra China, ni siquiera durante la violenta represión de Beijing contra los manifestantes a favor de la democracia en Hong Kong en 2019.

El gobierno de Hong Kong, controlado por los comunistas, se ha expresado al respecto, exigiendo “explicaciones razonables” a los aficionados al fútbol y abriendo la posibilidad de exigir al Inter Miami el reembolso a sus aficionados, dado que la publicidad del partido presentaba de manera destacada a Messi. Una alta funcionaria de Hong Kong, Regina Ip, declaró dramáticamente: “La gente de Hong Kong odia a Messi, al Inter de Miami y a la mano negra detrás de ellos, por el desaire deliberado y calculado hacia Hong Kong”.

El Global Times informó que la policía de Hong Kong está procesando “al menos seis informes sobre Messi” y que “fanáticos chinos enojados” -a menudo armados por el régimen- están inundando los perfiles de redes sociales de Messi, Inter Miami y David Beckham, el popular Exfutbolista británico que es accionista del equipo, con mensajes de odio. El medio estatal agregó la amenaza de que el incidente podría comprometer la visita prevista de la selección argentina a China.

“Después de la decepción, muchos internautas expresaron en las redes sociales que los fanáticos chinos todavía dan la bienvenida a la selección argentina, pero ya no dan la bienvenida a Messi, quien carece de respeto por los fanáticos”, informó el Global Times .

Argentina, que alguna vez estuvo gobernada por izquierdistas amigos de Beijing, dio un dramático giro hacia la derecha en noviembre con la elección del presidente anticomunista Javier Milei, quien impidió que Argentina se uniera a la coalición BRICS encabezada por China y prometió no hacer ningún trato con “comunistas, ”incluida China.

“Podríamos hacer negocios con el lado civilizado de la vida. No hago transacciones con comunistas”, dijo Milei en 2021.