Luka Hein, de 21 años, empezó a experimentar problemas de salud mental cuando tenía 13 años. Sus padres estaban en medio de un divorcio y ella también comenzó una relación inapropiada con un hombre mayor en línea. Fue en ese momento que Hein comenzó a sentirse incómoda con el desarrollo de sus senos y su período, y pronto buscó la orientación médica del Centro Médico de la Universidad de Nebraska.

A los 55 minutos de su primera sesión, la Dra. Megan Smith-Sallans diagnosticó a Hein con un trastorno de identidad de género, según la denuncia presentada en el Tribunal de Distrito del Condado de Douglas, Nebraska.

”Al afirmar inmediatamente a Luka, los demandados ​​desarrollaron una única visión que bloqueó los otros factores que fueron o pudieron haber sido la causa o causas de la disforia de Luka”, se lee en la denuncia.

En ese momento, Hein había tenido varias hospitalizaciones psiquiátricas y le habían diagnosticado depresión y trastorno de ansiedad generalizada.

“Estaba pasando por el momento más oscuro y caótico de mi vida, y en lugar de recibir la ayuda que necesitaba, estos médicos convirtieron ese caos en realidad”, dijo Hein al Daily Mail .

Hubo múltiples señales de alerta que deberían haber impedido que el Dr. Perry Johnson realizara la “macabra cirugía”. Por ejemplo, Hein no recibió tratamiento hormonal.

“Al llevar a Luka a la cirugía sin primero someterla a tratamientos hormonales durante al menos un año, los acusados ​​violaron incluso el estándar de atención pro-transgénero de la Asociación Mundial Profesional para la Salud Transgénero (“WPATH”) para la cirugía de extirpación de senos”, se lee en la denuncia.

Después de la doble mastectomía, Hein comenzó a tomar testosterona durante cuatro años, lo que le provocó “irregularidades cardíacas, dolor en las articulaciones y dolor pélvico”.

En mayo, los legisladores de Nebraska aprobaron una ley que prohíbe la cirugía de “afirmación de género” en menores.