O. Rivas.- Crece la lista de deportistas cubanos que desertan de sus equipos para buscar un futuro mejor fuera de la isla. Si en marzo pasado se hablaba de cómo el receptor, Ivan Prieto, huyó tras la derrota ante el equipo de Estados Unidos durante el Clásico Mundial de Béisbol, ahora el tema de conversación es Denia Caballero, lanzadora de disco, medallista olímpica y campeona mundial en 2015.

Ella decidió apartarse de la miseria que ofrece el castrismo en Cuba y comenzar de nuevo en España. En su reciente paso por el país europeo ganó la medalla de plata en la competencia conocida como Meeting Diputación de Castellón. Pero decidió no servir más de peón a la dictadura, que poco y nada ofrece a los deportistas con condiciones deplorables de entrenamiento, sin equipos y con malnutrición.

Ahora Caballero reapareció para hablar desde la libertad. “Y de repente sabes que es hora de empezar algo extraordinario y confiar en la magia de los nuevos comienzos”, se lee en una de sus historias publicadas en Instagram. Así, con breves pero claras palabras deja en evidencia al régimen en La Habana, que se vale del deporte como instrumento de propaganda para aparentar una supuesta prosperidad que no existe.

Van 24 deserciones este año

Un boicot de la Federación cubana de Atletismo habría sido la principal razón para que Denia Caballero tomara la decisión de quedarse en España. Según Francys Romero, periodista de la fuente deportiva, especializado en la historia de la emigración de atletas de la isla, dicha institución “entorpeció” las negociaciones de la discóbola con Portugal, “incumpliendo la gestión con un club”.

En otras palabras, la dictadura le negó nuevos horizontes y mejores condiciones a Caballero. Con este caso, suman 24 atletas cubanos que han abandonado en 2023, agregó Romero. Es decir, más de la mitad de los 45 que desertaron en todo el año 2022. La mentira del régimen se cae a pedazos, al igual que sus intentos de mantenerlos en la isla, como la estrategia que aplicó en 2016 de regalarles vehículos.

Pero entre la deserción de Caballero y la del receptor de la selección de béisbol, hubo otros casos. En abril pasado huyeron los remeros Maykol Álvarez, Yoelvis Hernández y Osvaldo Pérez. Tal como menciona el portal 14 y Medio el primero lo hizo desde Santiago de Chile –donde se jugarían los Panamericanos de 2023– y los demás durante una escala en México.

“Nos tienen pasando hambre”

La frase pertenece a Dailin Suárez Pérez, una de las integrantes del equipo de hockey que se apartó a inicios de mayo de su delegación en Barcelona, España. Tomó la decisión junto a sus otras dos colegas: Yadira Miclín Galbán y Marianela López.

Cocinaban con leña y entrenaban con zapatos desgastados y desiguales, ya que no correspondían al mismo par. Las fotos que Suárez publicó en Facebook muestran la evidencia. Una de las imágenes la acompañó con una lapidaria frase “Amo a mi Cuba ¿pero quien me ama a mi?”. En otro de sus mensajes aseguró que recibían “una miseria” de salario, que pasaron “más hambre que un león enjaulado” y que en Cuba “se amanece con hambre y se acuesta con hambre”.

Son testimonios de primera mano que muestran un realidad cruda y desalentadora para los deportistas en la isla, mientras que las prioridades del dictador Miguel Díaz-Canel están en tenderle la alfombre roja y rendir pleitesía a su amigo, el autócrata iraní Ebrahim Raisi en una reciente gira que hizo por el país caribeño, Venezuela y Nicaragua.

Por su parte, la atleta Denia Caballero deberá esperar al menos tres años si desea competir bajo otra bandera, según los lineamientos de World Athletics, el órgano que rige las competencias de atletismo en todo el mundo.