Ex altos ejecutivos y antiguos miembros de la junta directiva del colapsado banco Credit Suisse (CS), que fue adquirido a mediados de marzo por su rival UBS en medio de una gran agitación bancaria, se asignaron primas gigantescas a sí mismos durante años, según reportó este lunes el diario suizo SonntagsZeitung.

El periódico señala que el esquema se puso en marcha en 2008 y, generalmente, el desembolso de las gratificaciones, que llegaron hasta cientos de millones de dólares en pagos únicos, se realizaba de forma oculta, ya que no figuraban en los reportes anuales.

Aunque el Consejo Federal (órgano ejecutivo de Suiza) decidió abolir o reducir las primas de los ejecutivos de la institución financiera en al menos un 25 %, los altos gestores del banco siguieron pagándose a sí mismos enormes cantidades.

Solo en 2019 se realizaron dos pagos de 50 millones de francos suizos (unos 56 millones de dólares) cada uno. Otros episodios incluyen la adjudicación de primas de hasta 30 millones de francos bajo acuerdos a los que los accionistas no tenían acceso.

En su investigación, el SonntagsZeitung nombra a siete antiguos ejecutivos de la empresa que se habrían enriquecido mientras ocupaban cargos en las unidades de inversión o gestión de activos.

Entre otros nombres, figura el del ex director ejecutivo de Credit Suisse, el estadounidense Brady Dougan, quien supuestamente aprobó un reparto de beneficios al tiempo que él mismo se embolsó 71 millones de francos en primas poco después de desatarse la crisis financiera mundial de 2008.