Reflexiones sobre la Iglesia (II): Garabandal
Javier Cordero Aparicio.- ¿Conocéis San Sebastián de Garabandal? ¿Habéis oído hablar de las apariciones de Garabandal? Yo, hasta hace bien poco, no sabía que la Virgen se había aparecido a cuatro niñas, entre 1961 y 1965, en el pueblecito cántabro de Garabandal. Este es un hecho tan extraordinario, similar al de Fátima, que animo al lector que desconoce este caso de apariciones marianas, ocultado por la Iglesia en España, a que lo investigue para así tener un criterio propio sobre ello (Youtube es una buena fuente de información). Yo lo tengo y manifiesto que no tengo ninguna duda que las apariciones son verdaderas, lo que corroboran múltiples y cristianos testimonios, entre otros el de una santa voz autorizada de la Iglesia, el Padre Pio de la Pietrelcina, como nos señala en una carta que escribió a las niñas:
“Mis queridas niñas
A las nueve de la mañana, la Santísima Virgen me encomendó que les dijera lo siguiente: “¡Oh benditas niñas de San Sebastián de Garabandal!
Yo les prometo que estaré con ustedes hasta el fin de los siglos y que ustedes estarán conmigo durante el fin del mundo y después, unidas conmigo en la gloria del Paraíso”.
Sin entrar a mucho detalle -no es el objetivo de estas reflexiones hablar en profundidad de Garabandal-, resumo que cuatro niñas del pequeño pueblo; Conchita, Mari Loli, Jacinta y Mari Cruz, junto al Padre Jesuita Luis María Andreu, tuvieron la dicha de ver a la Virgen.
Lo más destacado del más de un millar de apariciones, son los dos mensajes que la Virgen nos comunicó a través de las niñas:
El 18 de octubre de 1961, cuatro meses después del comienzo de las apariciones, en su primer mensaje la Virgen nos llamaba a realizar muchos sacrificios, mucha penitencia y a visitar al Santísimo. Decía también que la copa estaba medio llena, simbolizando el pecado y que debíamos orar mucho.
El segundo mensaje de la Virgen se da poco antes de finalizar el Concilio Vaticano II y del fin de las apariciones, el 18 de junio del 1965. Fue el Arcángel San Miguel el encargado de comunicar a Conchita el mensaje, de parte de la Virgen:
“…Antes la copa se estaba llenando, ahora está rebosando; muchos cardenales, obispos y sacerdotes van por el camino de la perdición, y con ellos llevan a muchas más almas…”
Para el proceso de investigación sobre las apariciones, ordenado por el obispo de Santander, este segundo y terrible mensaje afectará en sus conclusiones finales y obligará a que la autoridad eclesiástica, con el apoyo de los investigadores, traten de desacreditar a las niñas y acaben señalando que las apariciones eran falsas. Aun hoy la Iglesia sigue sin pronunciarse a pesar de tener un amplio dossier, en un cajón, con multitud de testimonios que confirman la veracidad de las apariciones. Solo se entiende por la ausencia de fe entre aquellos que deben decretarla.
Determinadas voces autorizadas de la Iglesia, relacionan las apariciones y los mensajes con el Concilio Vaticano II, ya que ambos son coincidentes en su inicio y final y no parece casualidad, sino más bien designios de la providencia que apareciera la Virgen durante todo el Cónclave.
Podría entenderse que el “camino de la perdición”, que refiere el segundo mensaje, señala las aberraciones doctrinales del Concilio Vaticano II que han corrompido el depósito de la fe y abandonado la moral, provocando la infecundidad en la Iglesia. Una de sus manifestaciones ha sido el enorme descenso de las vocaciones sacerdotales; así por ejemplo en España, los más de veinte mil seminaristas que había cuando se producían las apariciones de Garabandal, no llegan en la actualidad ni a una décima parte, para una población mucho mayor.
También pudiera tener algo que ver lo del “camino de la perdición” con los escándalos de los clérigos pederastas, ahora conocidos, algo que en 1965 no se le hubiera pasado por la imaginación ni al peor enemigo de la Iglesia.
Han visto la película ” Los Jueves , milagro”. Creo que està basada en esta historia
Pues no, es lo contrario, las “apariciones” son de principios de los sesenta y la peli es de 1957. Un prospero negocio.
No es un próspero negocio la aparición Mariana de Garabandal es auténtica,hay una foto sin trucar que a una de las niñas el arcángel San Miguel le da en la boca la santa eucaristía.
Caramba, es fabuloso. Menos mal que se la da en la boca.