El Ministerio de Igualdad, a través de la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género, ha lanzado una nueva y absurda campaña orientada a la criminalización del hombre y a proporcionar millones de euros a chiringuitos publicitarios y mediáticos amigos. “Querernos Vivas. Querernos Libres”, es el nombre de la nueva campaña del ministerio de Irene Montero, una iniciativa que “busca ayudar a detectar la violencia sexual y mostrar los recursos disponibles para las víctimas”, según sus promotoras.

Esta campaña ha sido presentada a través de diferentes vídeos que muestran varias situaciones enmarcadas en el periodo estival.

Señalan las responsables de la campaña que “el objetivo es poner el foco en las diferentes caras de la violencia sexual, muy presentes actualmente”. La campaña se centra en tres casos.

En el video que reproducimos se pone atención a los abusos en la infancia. Aquí, una mujer cuenta por teléfono su aversión al verano y al olor a cloro, que le recuerda a cuando su tío la cogía para enseñarle a nadar, “siempre después de comer, cuando no había nadie”. Es decir, la estigmatización del contacto físico a la mujer hasta por la gente más cercana.

“Mi tío me agarraba fuerte como para que flotara. Donde no hacía pie”, sostiene en el video la que hace de actriz

Claro, que habría que responder a la infeliz que si no la hubiesen sostenido a flote con fuerza, lo mismo hubiera perecido ahogada. Malo si son tus hijos, pero si son tus sobrinos, aún peor.

Nos preguntamos si los que discurren estos guiones son imbéciles o aún usan manguitos.

La ministra sin duda disfrutará con sus propios hijos la basura de sociedad que está fomentando con sus propios hijos. Tiempo al tiempo.