Por Jacob G. Hornberger.- Es posible que el paquete de ayuda de 40 mil millones de dólares que el Congreso estadounidense aprobó rápidamente para Ucrania se usaría, al menos en parte, para pagar sobornos multimillonarios a funcionarios ucranianos? Después de todo, ¿por qué otra razón los miembros del Congreso, así como los activos del Pentágono dentro de la prensa convencional, reaccionarían tan vociferantemente contra la idea de que el Inspector General controle cómo se usa el dinero? ¿Y qué mejor manera de garantizar que los funcionarios ucranianos permanezcan a bordo para la guerra perpetua que el pago de sobornos a los funcionarios que sirven en lo que quizás sea el régimen más corrupto del planeta?

Para los escépticos, me refiero a un artículo del Wall Street Journal de ayer cuyo título lo dice todo: “Funcionarios afganos de alto rango escaparon a casas de lujo en el extranjero”. El párrafo inicial dice: “Algunos altos funcionarios afganos y sus familias gastaron millones en la compra de casas caras en los EE. UU. y en el extranjero en los últimos años de la guerra, que se convirtieron en lujosos aterrizajes cuando escaparon de la escalada de violencia en Afganistán”. Luego, el artículo continúa detallando algunos de esos «aterrizajes de lujo».

De acuerdo, sí, es concebible que esos funcionarios afganos sean todos políticos y burócratas honestos en una nación empobrecida que se hicieron millonarios ahorrando debidamente parte de sus salarios gubernamentales.

Pero hay otra posibilidad, mucho más probable en mi opinión. ¿Recuerda esos aviones llenos de billetes de cien dólares proporcionados por los contribuyentes estadounidenses que los funcionarios del Pentágono enviaban a Afganistán? ¿Recuerdas que no había ningún Inspector General monitoreando cómo se desembolsaba todo ese dinero? Creo que hay muchas posibilidades de que se haya entregado a funcionarios afganos como soborno para que se unieran a ellos en apoyo de la invasión y ocupación estadounidense de su país.

Me acuerdo del plan de la CIA para impedir que Salvador Allende se convirtiera en presidente de Chile luego de que obtuviera una pluralidad de votos en las elecciones presidenciales de 1970. Dado que las elecciones se lanzaron al congreso chileno, la CIA decidió sobornar en secreto a los miembros del Congreso chileno con dinero de los contribuyentes estadounidenses como una forma de inducirlos a votar en contra de Allende.

La CIA también inició un esquema diseñado para inducir al establecimiento de seguridad nacional chileno a implementar un golpe violento que evitaría que Allende asumiera el cargo y, muy probablemente, lo dejaría muerto en el proceso. Como detallo en mi nuevo libro Un encuentro con el mal: la historia de Abraham Zapruder , cuando el comandante general de las fuerzas armadas de Chile, el general Rene Schneider, se negó a aceptar el plan malvado e ilegal de la CIA, la CIA orquestó su secuestro/asesinato. , que dejó a Schneider muerto a tiros en las calles de Santiago.

Irónicamente, la fuerte reacción pública en Chile contra el asesinato de Schneider acabó con el complot de soborno de la CIA, y el congreso chileno terminó confirmando a Allende como presidente. Tres años más tarde, la operación de cambio de régimen de la CIA tuvo éxito cuando el establecimiento de seguridad nacional chileno, con el pleno apoyo del establecimiento de seguridad nacional de EE. UU., tomó el control del gobierno, dejando muerto al democráticamente elegido Allende en el proceso.

Como he escrito repetidamente, la guerra en Ucrania no se trata de libertad. Se trata de ser miembro del viejo y podrido dinosaurio de la Guerra Fría conocido como OTAN. Los funcionarios ucranianos estaban dispuestos a sacrificar a miles de sus ciudadanos y la destrucción de su país aparentemente por el bien de unirse a la OTAN. La pregunta que obviamente surge es: ¿Hubo algo más, como el pago de sobornos multimillonarios de dinero proporcionado por los contribuyentes estadounidenses, que indujo a funcionarios ucranianos corruptos y deshonestos a sacrificar a sus ciudadanos y su país?