Juan Manuel Serrano

El PP ha sumado a Vox, Esquerra y Ciudadanos en su pretensión de que se destituya al presidente de Correos, Juan Manuel Serrano (ex jefe de gabinete de Pedro Sánchez), y sea sustituido por un gestor con experiencia en el sector, con lo que el Gobierno ha quedado al borde la de derrota en la votación que tendrá lugar este jueves en el Pleno del Congreso.

La iniciativa, una moción consecuencia de la interpelación dirigida hace una semana a la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ya cuenta con más votos que los que suman PSOE y Podemos, pues al apoyo anunciado del PP, Vox, ERC y Cs se suma que también han abierto la puerta a respaldarla otros socios del Gobierno como Compromís y el BNG.

Javier Bas, diputado del PP, ha calificado de “fiasco” la estrategia del presidente de Correos, que a su juicio llegó al cargo “atendiendo únicamente a criterios de amistad y afinidad política” con Pedro Sánchez.

Describiendo un “clima laboral insostenible”, con “ceses fulminantes por discrepancias con clientes”, una “fuga masiva de clientes a la competencia”, Bas ha señalado que Correos avanza hacia la “quiebra técnica” y que este mismo año registra una desviación respecto al plan operativo del -400%.

Tanto el PSOE como Unidas Podemos han puesto en duda el interés del PP en defender una empresa pública, e incluso socialista César Ramos se ha preguntado si la moción iba también contra el nuevo presidente ‘popular’, Alberto Núñez Feijóo, que también fue nombrado en su día presidente de Correos sin tener experiencia en el sector.

Eso sí, Laura Domínguez, de Unidas Podemos, ha reconocido que “es cierto que son amplias las críticas al señor Serrano” y también ha calificado como “lamentable” la decisión de desprenderse de edificios de la compañía, como el de Valencia.

ERC carga contra la “nefasta” gestión de Serrano

Sin embargo, Jordi Salvador, de ERC, ha recordado en el debate que ese servicio postal universal no se cumple y ha calificado a Serrano como “personaje realmente nefasto” para la gestión de la compañía y ha tachado como “nefasta decisión” priorizar la paquetería frente al servicio postal. “Salvo que el objetivo sea privatizarlo”, ha dicho, reconociendo sus sospechas de la intención privatizadora del presidente tanto en esto como en la fragmentación de la compañía.

Tanto Salvador como Joan Baldoví, de Compromís, han destacado cómo el rechazo a Serrano ha unido a la plantilla, que ha convocado tres días de huelga en la compañía en junio ante el “desmoronamiento económico, laboral y de servicio público”.

“Dicen que está al borde de la quiebra técnica y de la ruina económica”, ha abundado el diputado de Compromís, criticando “el desplome de la carga de trabajo” y el “abandono del servicio público y la calidad”. Por ello, aunque ha invitado al PP a modificar su moción y solicitar cuestiones concretas, como la cobertura del empleo y el mantenimiento de oficinas, ha celebrado como “oportuna” la iniciativa: “Le hace falta un toque de atención para que espabile”.

Por su parte, José María Figaredo, ha recordado a Unidas Podemos la contradicción de sus medidas contra las ‘puertas giratorias’ con el hecho de que se avale el nombramiento de Serrano al frente de Correos, destacando que no hay mayor ‘puerta giratoria’ que pasar de jefe de gabinete de Sánchez en el PSOE a presidente de una empresa pública.