Traicionarme a mí mismo
Esa es la frase que pronunció el presidente de VOX al comienzo de la andadura de su partido, cuando uno de los muchos ciudadanos españoles, abandonados y traicionados por los partidos a ambos lados del espectro político, se dirigió a él para pedirle garantías de su lealtad. La respuesta de Abascal es la frase que da título a este artículo: “traicionaros a vosotros sería traicionarme a mí mismo”. Muy pocos años años después, desaparecido de sus actos públicos el presidente de honor del partido, Ortega Lara (muchos sostienen que apartado y ninguneado hasta que interese exhibirlo como un trofeo que otrora encendió la ilusión de muchos y hoy sólo evidencia la desvergüenza utilitarista del partido-negocio) también van desapareciendo, apartados, ninguneados, maltratados…. todos aquellos que consideraron y aún consideran a Ortega Lara como un símbolo de la España apresada, maniatada, encarcelada y torturada por sus enemigos, la España que comienza a considerar el suicidio ante la desesperanza de una liberación que no llega.
El último desencantado a fecha de hoy es Alejandro Urteaga, histórico militante de Vox en Murcia, medalla al mérito de la Guardia Civil con distintivo rojo, víctima del terrorismo primero y del oportunismo político posteriormente. Él fue de los primeros en afiliarse a un partido en el que muchos otros después, en buena parte por su presencia y la de otros como él, elegimos creer.
No parece haber en el horizonte nada que pare en este momento el ciclo alcista de Vox. La reciente crisis del Partido Popular y el temor de un regreso de Feijoo a caminos ya recorridos anteriormente, la desaparición efectiva de Ciudadanos, la abyecta traición del PSOE y la enloquecida deriva woke de Podemos nos dicen que VOX ha de triunfar y formar parte del próximo gobierno de España y de algunas regiones españolas, como ya lo es en Murcia y Castilla Leon; pero a Ortega Lara, a Juan Jara, a Alejandro Urteaga, a Francisco Serrano, a Alba Peña y a tantos y tantos otros que llegaron al partido con una hoja de servicios impecable y una dignidad a prueba de aparatchiks, a esos ni los puede convencer ni los puede engañar ya ni Vox ni el honesto Abascal. Quién sabe las cosas que aún nos quedarán por ver.
*Portavoz de VOX en la Asamblea de la Región de Murcia