Pedro I. Altamirano.- En un acto de absoluta soberanía nacional y legítimo control de sus fronteras, las autoridades marroquíes del aeropuerto “Hassan II” de El Aaiún, impidieron la entrada a tres supuestas activistas, presuntas colaboradoras de la banda armada terrorista Frente Polisario. Entre ellas a Inés Miranda, consejera del Cabildo de Gran Canarias, Flora Ramos y Raabub Mohammed Lamín. Un injustificable acto de provocación por parte de estas tres personas, con el único pretexto de distraer la atención de la prensa española, de los muchos problemas por los que pasa la credibilidad internacional del Frente Polisario.

Hay que recordar que el denominado “Caso Ghali” llama a la puerta de los máximos responsables de la actual administración española en manos de Pedro Sánchez y el aparente desaparecido Pablo Iglesias. Sin ir más lejos, esta provocación a la soberanía del Reino de Marruecos, coindice con la comparecencia de la ex Ministra de Exteriores González Laya ante el Juez, con las graves consecuencias judiciales que le puede acarrear. Del mismo modo preocupan las posibles implicaciones que se puedan derivar de su declaración, ya que todo parece apuntar de forma directa a la saliente vicepresidenta Carmen Calvo, y al Presidente del Gobierno Pedro Sánchez.

Por cierto que Pedro Sánchez acaba de aforar y, de ese modo proteger en lo jurídico a Carmen Calvo y José Luis Ábalos, ante la posibilidad que, como hemos comentado, González Laya los señale de forma directa. Una maniobra a la defensiva para intentar retrasar la acción de la justicia española, lo que demuestra que los responsables políticos del caso Ghali han entrado en pánico.

Coincide del mismo modo con la decisión de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional de anular el archivo de la causa contra el líder del Frente Polisario y presunto genocida Brahim Ghali, ordenado por el Juez Santiago Pedraz. Esto da la razón a la Asociación Saharaui para los Derechos Humanos (ASADEDH), y se abre la puerta a una verdadera, y profunda investigación de los hechos que se reflejan en las denuncias contra los presuntos contra Ghali.

También es de resaltar que, el Grupo Internacional de Apoyo a la Paz y Reunificación Saharaui, acaba de terminar su trabajo previo en las provincias del sur de Marruecos, y ya prepara su asamblea internacional en Málaga, donde se harán públicas las conclusiones y recomendaciones a la comunidad internacional. Importante señalar, que avanza los preparativos judiciales para llevar a todos los representantes, responsables y colaboradores del Frente Polisario ante la Corte Penal Internacional por delitos de lesa humanidad. Esto pone al Frente Polisario en una delicada posición internacional.

Todo ello justifica esta puesta en escena de las tres activistas que me recuerda la película de Pedro Almodovar “Pepi, Luci, Bom y otras chicas el montón” o bien esa otra de “Saharauis al borde de un ataque de nervios”, perdón rectifico “Mujeres al borde de un ataque de nervios” magnificas películas del director manchego. Una puesta en escena la realizada por Inés Miranda, Flora Ramos y Raabub Mohammed Lamín, perfectas conocedoras del guion a seguir, conocedoras del cómo se desarrollarían las cosas, y los resultados que tendrían.

Lo primero que me pregunto a modo personal es ¿ha comunicado el viaje la Consejera al Cabildo, creo que es cargo público, y por tanto debe informar de sus viajes? ¿Quién ha pagado los billetes? Porque en el caso de haberlos pagado el Cabildo, sería complicado justificar un viaje de ida y vuelta a sabiendas que no serían admitidas, lo que supondría que han tirado a la basura dinero público, y después ¿Qué hace una consejera canaria de paisaje, viajando al Aaiún con la desgracia que ocurre en estos momentos en Canarias con el volcán de La Palma?

Lo siguiente que me pregunto es que, siendo conocedora que ya ha sido rechazada en varias ocasiones en la frontera, y que su pasaporte no es válido en estos momentos para entrar en Marruecos, ¿porqué no se ha informado en los equipos jurídicos del Cabildo, y solicitado que le arreglar el problema de su pasaporte para poder ser admitida en territorio marroquí (si no sabe el número de teléfono que sus equipos jurídicos, se los puedo proporcionar de inmediato). No quería entrar en Marruecos, pienso que lo que quería es que la expulsaran para montar el numerito de circo.

Eran conscientes que no las dejarían entrar, y aún así lo hicieron con el único objetivo de montar un espectáculo televisivo, para desviar la atención de la dura realidad en la que se encuentra el Frente Polisario. Para terminar la trama aparece una de las actrices más versátiles de Ghali & Compañía, la conocida como “Sultana Jaya” que lo mismo vale para un cosido que para un descocido. Pésima maquilladora de efectos especiales, que lo mismo aparece con un ojo morado a lo Podemos, que con una mascarilla pediátrica para ventolin. Eso sí, fue la primera en ir a votar, junto a sus familiares, el pasado ocho de septiembre en las elecciones municipales y legislativas realizadas en Marruecos, en las que las provincias del sur fueron las que más alta participación tuvieron en las mismas.

Un circo mediático, que vale para alimentar las ilusiones de los ingenuos que aún creen que, el Frente Polisario es una Asociación social recreativa deportiva, en vez de una banda armada que usa niños para el terrorismo. En realidad lo que han puesto en valor es la seriedad del Estado marroquí en la defensa de sus fronteras, al impedir circos ambulantes en su territorio. Una Nación que acaba de imponer de forma clara e indiscutible su plena soberanía nacional.

Por cierto. Es una propuesta. Ya que dudo que el régimen argelino me permita ir a Argelia a visitar a los presos políticos, periodistas argelinos, activistas de la Hirak y de la Kabilia, porqué no van estas tres mujeres a visitarlos de mi parte, ya que seguro que a ellas, no le pondrían ningún problema para entrar en Argelia.