Julia Navarrete Bergmann.

La desafección de muchos aficionados hacia la selección de Luis Enrique llega también a las filas de Vox. La número 3 del partido de Abascal en el municipio malagueño de Bemalmádena, Julia Navarrete Steegman, ha expresado hoy su deseo de que el combinado de Luis Enrique sea eliminado de la Eurocopa y ha expresado al mismo tiempo sus simpatías por el combinado italiano.

De madre alemana, Navarrete Steegmann dice tener el “corazón dividido” entre las selecciones germana y transalpina, si bien se decanta por esta última. “Es una selección más identitaria que la alemana, y por consiguiente, más nuestra”.

Respecto al por qué de su rechazo al equipo de Luis Enrique, la representante de Vox lo razona así: “Tanto el entrenador catalán como los jugadores representan los peores valores de la sociedad española. Cualquier triunfo de esta selección representa un balón de oxígeno para Pedro Sánchez. Nada que sea bueno para Sánchez debería serlo para los españoles decentes”.

Aunque el seleccionador español es de origen asturiano, Navarrete recuerda que fue entrenador del FC Barcelona durante el ‘proceso’ golpista y que siempre ha sido elogiado por los líderes independentistas. “Ahora dice que los españoles debemos estar unidos, pero entonces no tuvo un solo gesto de apoyo a la unidad nacional, y nunca le vimos nada incómodo en su papel de representante de una institución que apoyó el ‘procés’ desde el primer momento”.

Para nuestra interlocutora, tampoco ha pasado por alto el hecho de que los derechos de retransmisión de La Roja pertenecen a Mediaset, que considera “uno de los principales instrumentos propagandísticos de la izquierda”.

Navarrete anima a los patriotas españoles a que se desmarquen de la selección y, como ella, celebren sus derrotas. “Me encantaría que esta noche sucumbiera ante Eslovaquia y que no pasara de grupo”, subrayó.

Por último, la hispano-alemana ha pedido a los aficionados que acudan hoy a ver a la selección  en el estadio de La Cartuja, que piten a sus jugadores y muestren de esa forma su rechazo a la conversión del equipo de Luis Enrique en “una coartada de la sedición progresista para desviar nuestra atención de los grandes males que están destruyendo nuestra patria”.