Lealtad y deslealtad
FP.- Ayer Sánchez llamó desleales a quienes en la oposición política critican su gestión, como desleales son las comunidades autónomas que no se pliegan a sus caprichos, como desleales son los jueces que denuncian el asalto al poder judicial. También lo son los medios de comunicación y periodistas que analizan críticamente la actualidad política.
Sánchez como todo sátrapa ha comenzado la etapa de señalar la deslealtad para encubrir la escandalosa catástrofe en la que tiene sumido al país.
Rodeado de incompetentes en el Gobierno, el Parlamento y la administración pero leales a su causa personalísima; rodeado de antisistemas en la coalición gubernamental y el bloque de investidura pero leales al plan de desmontar la Constitución; rodeado de manipuladores mediáticos de la realidad pero leales a la subvención, así vive Sánchez y así sufre España.
Hoy presenta por enésima vez el plan de reactivación económica, el mismo de siempre, elaborado por un comité de expertos del que nadie sabe sus nombres, como nunca se supo el de los que conformaron el comité que decidía desescaladas por territorios, como nadie conoce los miembros del comité que persigue bulos y noticias falsas.
Ahora a señalar con el dedo de la acusación, si no llegan las vacunas, si no llegan las ayudas europeas, si no se acaba con la pandemia, si no se reactiva la economía, será culpa de los desleales, de los que siguen en pie criticando todo este lamentable espectáculo de soberbia, incompetencia y descaro.
Repartiendo cargos y prebendas en relación a su propio interés y denunciando en función del nivel de crítica a la gestión que desarrolla. Recuerda tanto a los regímenes totalitarios que solo falta que oficialmente lo promulgue.
Las lealtades y deslealtades son el peligroso camino hacia el abismo político.
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