Los expendedores de ideologías y los teóricos irredentos que todo lo destruyen
FP.- La izquierda abandonada a su suerte, mortecina, hastiada, consumida de tanta ideología y tan fuera de la realidad sigue en su desvarío llevando hacia el colapso a toda la nación.
Cuatro ejemplos de las últimas 24 horas:
La mitad de los jueces de España alertan a la Unión Europa del golpe a la Justicia que están fraguando desde la coalición social comunista.
Es la noticia más relevante de la democracia en materia judicial porque se denuncia la sumisión del poder judicial al poder político y se traslada a nuestros socios comunitarios para pedir auxilio. Lo que además pone en serio peligro la llegada de las ayudas para salir de la crisis provocada por la pandemia por la sanción que se le puede aplicar al país.
El Gobierno estudia subidas en los impuestos sin justificación objetiva, atacando de nuevo a las clases medias, con afán confiscatorio de la propiedad e impidiendo la reactivación económica.
Somos el único país que grava el patrimonio y las herencias. Esta manía persecutoria desincentiva el trabajo, el esfuerzo y el ahorro claves para nuestra prosperidad colectiva.
Se anuncian contrarreformas en materia del mercado laboral en pleno crecimientos del paro, más de 6 millones de parados y cierre de empresas, para hacer todavía más costosa la contratación.
Las reformas laborales de Aznar y Rajoy generaron siempre empleo en masa y las decisiones de la izquierda siempre destruyeron empleo.
Se advierte de una nueva vuelta de tuerca en aplicación de la memoria unilateral y de imposición histórica.
De nuevo para tapar vergüenzas e incapacidad se pretende volver a seguir dividiendo a la sociedad aniquilando la concordia que permitió la llegada de la democracia.
Todo este desbarajuste político de un Gobierno que se ha convertido en expendedor de ideología tuvo ayer en el Congreso la más gráfica demostración del desastre en la que se está sumiendo toda la arquitectura institucional. La Reina Letizia tuvo que esperar en la puerta para ser recibida por la presidenta del Congreso y la vicepresidenta del Gobierno como invitada a un acto en el propio parlamento.
Perseguir a los jueces independientes, porque no aplican la ley que ellos pretenden, subir los impuestos haciendo creer que es a los ricos, reformar el mercado laboral perjudicando realmente al trabajador y retorcer la historia para imponer una visión parcial, es solo el paroxismo ideológico de la jornada de ayer en España.