Por qué decantarse por el renting de coches para particulares
Vivir en un mundo tan dinámico como el actual hace necesario que surjan nuevas combinaciones comerciales que se adapten a los tiempos que corren. El renting para particulares es una de ellas. Se trata de un contrato mercantil de alquiler a largo plazo por el cual podremos utilizar un vehículo como si fuera nuestro sin tener que preocuparnos del mantenimiento del mismo. A pesar de estar sujetos a ciertas responsabilidades y deberes de diligencia y cuidado, lo cierto es que esta modalidad de contratación permite despreocuparse de muchas de las cuestiones que hacen que tener un coche sea, en ciertas ocasiones, un quebradero de cabeza. Con el pago de una cuota fija, todo lo que no sea combustible, correrá por cuenta de la empresa de renting. Atractivo, ¿verdad? Veamos un poco más.
Cosas a tener en cuenta en relación al renting
Salvo que compremos un coche de lujo o un clásico, el automóvil que adquiramos comenzará a depreciarse desde el día uno. A pesar de que, a priori, las cuotas que se fijan en este tipo de contratos puedan parecer elevadas, optar por el renting repercute en un ahorro de aproximadamente el 15% en los gastos que giran alrededor del coche y su mantenimiento.
Si nos olvidamos de las cifras y nos centramos en los aspectos cualitativos, el renting se presenta como una alternativa muy apta también. Normalmente, los vehículos asociados a esta fórmula contaminan menos, son más seguros (ya que se suelen prescribir los vehículos que más elementos de seguridad contienen), y ofrecen grandes beneficios en términos de comodidad para el usuario.
Mencionar, además, que el renting, a diferencia del leasing, es accesible a particulares, y que se trata de un contrato con una duración de entre un mes y 48 meses. La cuota a pagar pactada incluirá servicios como el seguro a todo riesgo, así como los paquetes de mantenimiento, reparación y reposición que se hayan contratado.
Evolución del renting en España
Se trata de una modalidad cada vez más usual. Son muchas las personas que se decantan por la flexibilidad que ofrece este sistema para la inversión de un vehículo para su uso personal o familiar. Aunque la primera compañía que ofrecía servicios de renting en nuestro país se remonta a 1985, el verdadero auge de este servicio no se ha asentado hasta la llegada del nuevo siglo, a partir del año 2000 en adelante.
A día de hoy, el renting representa en torno al 16% de las matriculaciones de vehículos en España, y se prevé que este porcentaje pueda crecer de manera notable en los próximos años.