Voluntarios ayudando a quitar nieve en la entrada de un centro sanitario.

Paloma Cervilla.- Leo con verdadera estupefacción los comentarios de una cierta izquierda miserable criticando que Almeida y Díaz Ayuso hayan pedido la colaboración de la gente para quitar la nieve de las entradas de sus casa, con el argumento de eso es una tarea de las administraciones públicas. Ya estamos otra vez con el gratis total y que el papa Estado me solucione la vida.

Ante una situación como la que está viviendo Madrid, con una nevada histórica que ha colapsado la ciudad, no hay Estado que pueda solucionar esto de manera inmediata. Ya está bien de extender la idea de que el Estado lo puede todo, y además gratis, y que la gente no tiene por qué arrimar el hombro en un momento así.

Un conductor con su 4×4 ayudando durante la nevada.
Afortunadamente, esta izquierda llena de una amargura incomprensible va por un lado, y la buena gente, va por otro. Qué ola de solidaridad tan bonita ha recorrido Madrid estos días. Conductores que ofrecían sus 4×4 para llevar a sanitarios a los hospitales, trasladar enfermos; ciudadanos que retiraban la nieve de sus casas y también la de sus vecinos, de los hospitales; otros que se ofrecían a realizar comprar, ir a las farmacias.

La ideología no lo puede impregnar todo, y mucho menos cuando se trata de episodios como éste, que se avisó, claro que sí, pero cuya dimensión ha desbordado a todas las administraciones. Es imposible contar con un dispositivo para algo tan excepcional como la nevada del siglo, adquirir máquinas quitanieves para algo que sucede una vez cada cincuenta años.