Por qué las casas pasivas son las más sostenibles
La eficiencia energética está cada vez más presente en el sector de la construcción. La demanda pide cada vez más sostenibilidad en los materiales, en las formas de construcción, y en casi todos los aspectos de los proyectos de arquitectura en general. Todos hemos oído hablar de conceptos como eficiencia energética o sostenibilidad, pero puede que si no estamos muy al día en el sector de la construcción, no estemos muy familiarizados con el concepto de las passivhaus, o casas pasivas.
¿Qué es una passivhaus?
Este concepto es el nombre del máximo estándar de eficiencia energética con el que se puede calificar a un edificio. Tiene su origen en Suecia, en mayo de 1988. El primer edificio que recibió esta calificación se construyó en Alemania en 1990. Hoy en día se han construido miles de viviendas con el estándar passivhaus, la gran mayoría en Alemania y Austria.
Para recibir esta calificación, el inmueble debe reunir algunos aspectos básicos en materia de eficiencia energética, como son un gran aislamiento, máximo control de infiltraciones, buena calidad del aire interior, así como un uso eficiente de la luz solar como fuente de climatización. Se calcula que los edificios con esta calificación son un 75 % más eficientes que las construcciones nuevas. En el caso de las edificaciones antiguas este dato asciende a un 90 %.
Ventajas de las viviendas passivhaus
Algunas de las principales ventajas de los edificios con el estándar passivhaus son las siguientes.
Ahorro en calefacción y aire acondicionado
Estas viviendas tienen un gran aislamiento tanto térmico como acústico, por lo que conservan su temperatura interior sin necesidad de sistemas de climatización. Esto nos ayudará a ahorrar en nuestras facturas de gas y electricidad.
Alta calidad del aire interior
Al contar con un excelente aislamiento, la filtración de contaminación y olores del exterior es casi nula, conservando una gran calidad del aire interior. Por otro lado, las viviendas con el estándar passivhaus cuentan con una serie de conductos interiores que hacen que el aire circule por la vivienda garantizando una constante renovación.
Sostenibilidad
Gracias a la baja demanda de sistemas de calefacción y aire acondicionado, el impacto ambiental de estas construcciones es muy reducido, lo que proporciona un alto grado de sostenibilidad.
Gran calidad de ventanas y carpintería
Para obtener un excelente aislamiento y conseguir el certificado passivhaus es necesario que la vivienda cuente con ventanas de calidad muy alta, así como unos acabados de carpintería acordes con dicha calidad.
Existe una certificación para viviendas con menor eficiencia que las passivhaus, que se llama EnerPHit. Las viviendas antiguas, por su estructura interna, entre otras razones, nunca podrán alcanzar el nivel de eficiencia necesario para obtener el estándar de passivhaus, pero si se realizan obras de rehabilitación y mejoran su grado de eficiencia energética podrían obtener este otro certificado.
Como hemos podido comprobar a lo largo de este artículo, la eficiencia energética es un aspecto básico de la arquitectura moderna, ya que resulta una pieza de gran importancia en la lucha contra el cambio climático.